Bienvenidos a El mirlo de papel

Soy Varech y ando por la Red desde hace un tiempo, lo cual me produce a veces quebraderos de cabeza aunque la mayoría de las ocasiones me satisface.

29 de diciembre de 2012

Luis Miranda Podadera

Como soy de libros viejos, hoy he estado ojeando el Miranda Podadera que rescaté de la casa de mis tías. Una de ellas estaba casada con un maestro de escuela, que se ayudaría, como otros profesores de la época, de este tratado de ortografía a la hora de impartir sus clases.
Es una séptima edición, que corresponde aproximadamente a 1930.

27 de diciembre de 2012

Ponga un enochorra en su vida

Se nos ha llenado España de estos especímenes, que disfrutan oliendo y removiendo el vino en la copa.
Hay algunos que cuando se ponen a hablar de vinos, se transfiguran: las aletas de la nariz se les expanden, agarran el cuerpo de la copa como si agarraran un queso de tetilla y cierran los ojos para que nada les distraiga a la hora de valorar el preciado líquido, que huelen una y otra vez como perro en una esquina. Hay que verles la cara, a punto de entrar en un éxtasis enológico, mientras disfrutan de su minuto de gloria frente a los humildes mortales que no saben apreciar lo que tiene entre las manos.
Una, a lo largo de su vida, ha conocido gente que verdaderamente sabía de vinos, pero ahora, ligada a los adosados y a las barbacoas, ha surgido una generación que quieren entender de vino por encima de todo, y que da la tabarra a todo el que se le acerque en las comidas, explicándoles las excelencias del caldo en cuestión.
A esos son a los que yo les llamo enochorras. Eso sí, cuando vas a un restaurante piden "el de la casa", con lo cual se curan en salud. Yo no entiendo de vinos, ni quiero entender, porque no me gusta. Es más, soy el terror de los enochorras porque por muy caro que sea, lo mezclo con casera, lo que provoca espasmos faciales en el resto de comensales.
Hoy he comido con un nosequé tondonia. Ni idea. Con gaseosa no estaba mal.

25 de diciembre de 2012

Soneto para vosotros



Hace años que emprendí un viaje
acompañada de gente querida.
En sus hombros pude apoyar mi vida
y ellos conformaron mi bagaje.

Mas algunos cogiendo su equipaje
se bajaron cansados de la ida,
y dando su batalla por perdida
hundieron en la tierra su coraje.

Seres queridos que son mi amuleto,
sombra que a mi alrededor gravita,
callados están en su mundo quieto.

Hoy, que a la gente se felicita,
les mando desde el alma este soneto
que en voz baja mi corazón recita.


carmen canales

24 de diciembre de 2012

Sopa de almendras

Vivo cuarenta años en Madrid y nunca he hecho esta sopa, pero como nunca es tarde, esta noche la probaremos. Más que sopa he hecho pudin porque no me atrevo yo con caldo de postre. No puedo decir cómo está, ya que no la he probado.
Hay cosas de Madrid, típicas de Nochebuena que no me gustan, como el besugo o la lombarda. Esperemos que este plato esté rico.

Gambones kadaif

Simplemente colas de gambones ensartadas en una brocheta y envueltas en pasta kadaif. Al horno un poquito, y ya está.
Mucho ojo con la pasta. Fui al Club Gourmet del Corte Inglés, y cogí la última que quedaba, pero sorpresa, estaba seca y la he tenido que hidratar, con lo cual se han roto las hebras y no los he podido envolver bien. ¡Un fastidio! Después de ir expresamente por la pasta, me encuentro con esto. Ganas me han dado de presentarme allí con el paquete, pero no tengo tiempo, así que hoy irán tal cual están en la foto.
Si están bien envueltos se pueden freir.

Tronco de turrón

Lo he hecho para comerlo mañana, y ha salido tan requetebueno que lo pongo aquí por si alguien lo quiere hacer. Además es muy fácil.
Está hecho en tres pasos.
Paso 1º
Plancha de bizcocho genovés con tres huevos, tres cucharadas de harina y tres de azúcar, además del sobrecito de levadura química.
Se separan las claras de las yemas y se baten estas a punto de nieve, añadiendo luego poco a poco el azúcar, luego las yemas, y ya sin batir, se echa la harina tamizada y mezclada con la levadura. Con una cuchara, y en movimientos envolventes, se une todo bien y se pone en una plancha de silicona bien extendida la masa, y sobre la bandeja del horno, que ya tendremos precalentado a 180ºC. Se tarda más en explicarlo que en hacerlo. A mí me ha llevado cinco minutos la elaboración de la plancha de bizcocho.
Paso 2º
Hacer el ganache de cobertura con 200cc de nata de montar y  chocolate Nestlé postres de 250 gr.
Se calienta la nata y se disuelve en ella el chocolate hasta que esté todo fundido.
Se reserva hasta que esté bien fría.
En el mismo recipiente se monta con unas varillas.
Paso 3º
Mousse de turrón con una tableta del blando, 200 cc de nata, dos yemas, 100 grs de azúcar y 1/2 vaso de agua.
Con el azúcar y el agua hacemos un almíbar clarito, y ahí echaremos el turrón en trozos y las dos yemas. Batiremos a fuego suave con las varillas, enfriaremos e incorporaremos por último la nata montada.

Sobre la placa de bizcocho poner la crema de turrón, enrollar y cubrir con el ganache. La decoración es a gusto del consumidor. Como el ganache es bastante espeso, la textura del tronco no hay prácticamente que tocarla.
Felices fiestas.

21 de diciembre de 2012

No sé si despedirme

Pues eso. Que no sé si nos vamos o no, y ando indecisa sobre las cosas que pueda hacer o no en el día de hoy.
Porque a ver: a mí que me lo digan clarito lo del fin del mundo para saber a qué atenerme, que estoy en un mar de dudas.
Como no sé la hora, tengo la comida el alto. Sacaré algo del congelador por si la cosa fuera por la tarde y nos pillara aquí la hora de comer, porque esperando esperando, lo mismo nos entra hambre, y ya que nos tenemos que ir, que al menos nos vayamos ya comidos, que quién sabe lo que nos espera.
Desde luego, hoy no limpio. ¡Que le den a la casa! Sería de tontos limpiar por limpiar, y entre lo poco que me gusta y la inutilidad, lo dicho: que hoy paso. Total, si alguna vez nos encuentran estará todo lleno de polvo...
Tengo que llamar al gas para que no vengan a revisar la caldera. Ya me da lo mismo que explote.
Y en cuanto al menú de Navidad, hasta mañana no pienso calentarme la cabeza.
Mirándolo bien, hay que ver las cosas positivas que puede tener el fin del mundo.
De momento son las cuatro de la madrugada y no veo yo mucho movimiento, así que no espero más y me voy a la cama.
Dejaré en el blog la fotografía de un bellísimo amanecer entre las islas que rodean Estocolmo, como regalo a un mundo, que según los mayas, mañana hará ¡PUM!
Y si ya no nos volvemos a ver, pues ha sido un placer haber pasado por aquí.
Que explotéis a gusto.

Almendrados


La estrella de los pastelillos de Navidad.
Ingredientes:
1 kilo de almendra molida
1/2 kilo de azúcar
5 yemas y 3 huevos enteros (de los normales, que no sean muy gordos)
3/4 de kilo de cabello de ángel
Canela
Raspadura de limón.
Obleas

Preparación:
Se amasan juntos el azúcar, la almendra, la raspadura de limón, las yemas y los huevos.
Se forman bolas a las que se les hace un agujero para rellenarlas con el cabello de ángel y se cierran bien por abajo para que no se salga.
Se rebozan en azúcar y canela y se ponen sobre las obleas, con el cierre hacia abajo.
Precalentar el horno a 180ºC (mejor con aire) y hornear hasta que los empecemos a ver dorados.
Se pueden rellenar también con dulce de yema, o de boniato. Eso va en gustos.
La foto me ha salido bastante mal, y aseguro que el color al natural es bastante más apetecible.

Leche asada




Mi madre solía hacer mucho este postre porque nos gustaba a todos y además porque era tan sencilla su elaboración, que no daba pereza ponerse a ello.
La leche asada, tiene diferentes recetas según las regiones, pero la que hacemos por Alicante es esta, que está para chuparse los dedos.

Ingredientes:
Azúcar para caramelizar el molde
1 litro de leche entera
8 huevos
8 cucharadas de azúcar
Canela molida
Soletillas

Preparación:
Caramelizar un molde apto para horno.
Batir los huevos con el azúcar e incorporar la leche. Mezclar bien.
Colar sobre el caramelo.
Repartir por encima las soletillas, teniendo cuidado de que se remojen bien. No echarlas todas de una vez porque al mojarse aumentan de tamaño y está más rico el postre si no es demasiado compacto. Procurar que toda la bandeja esté cubierta con estos bizcochos.
Por último echar por encima bastante canela molida.
Precalentar el horno a 200ºC y cocer una media hora aproximadamente. De todas formas pinchar con una aguja y cuando salga seca, pues ya estará listo el postre. 
Aviso que es adictivo, y que ya con el olor que desprenderá mientras se hace, los jugos gástricos se os irán poniendo a tono.

20 de diciembre de 2012

Una historia detrás de cada foto



Al hilo de lo que una buena amiga comentó no hace mucho en facebook sobre las fotos antiguas, me vino a la memoria la sensación tan deprimente que tuve en una de mis visitas al Rastro. Me atrae lo viejo, qué le vamos a hacer, y disfruto revolviendo en los montones de objetos polvorientos por el paso del tiempo.
En esas andaba cuando me topé con un álbum de boda. Él, vestido de militar con su espada y todo, y ella con su velo sujeto por una diadema calada casi hasta las cejas, ambos con rostro felicísimo por el momento que estaban viviendo. Juro que me entraron ganas de traérmelo a casa, simplemente por la rabia que sentí al pensar que para sus familiares no tenía ningún valor, y que les importó un bledo que las personas allí retratadas fueran a parar a una tienda de cosas viejas. ¡Qué pena!
A mí, que me encanta hacer álbumes de todo tipo y tener a mano los recuerdos de los míos, me dolió en el alma lo que vi porque no me gustaría que mis cosas rodaran por ningún sitio.
Recuerdo que mi madre, cuando murió mi abuela, sacó la caja de las fotos y una a una las fue rompiendo para que no fueran a parar a manos ajenas. Entonces no lo entendí, pero cuando contemplé en la tienda ese álbum de boda por el suelo, supe que mi madre tenía razón.
Le doy mucha importancia al conocimiento de mis antepasados, y de hecho tengo un buen trabajo, o al menos a mí me lo parece, encaminado a que mis hijos, mis nietos y los que vayan viniendo, sepan cómo eran, pero con la mayoría de fotos sueltas que hay en la caja, esa que todos tenemos, haré lo que mi madre hizo, porque la historia que acompaña a cada retrato no merece ser tirada por los suelos.

10 de diciembre de 2012

Adán, Eva, y sus circunstancias




Hoy, pensando en la creación del mundo, he ido a parar irremediablemente a la primera pareja que lo pobló, los abueletes Adán y Eva.
Y he pensado en las tribulaciones que tendrían los pobres y en las mil contradicciones en las que incurrirían, seguramente por falta de información.
Cuando Adán estaba dando una vuelta por el paraíso, que debía de ser algo parecido a un resort, de pronto sintió algo así como un alien que salía de una de sus costillas y atónito debió de contemplar cómo aquel amasijo de músculos y huesos iba tomando forma.
._ Hola, soy Adán. ¿Quién eres tú?
._ Pues creo que soy Eva.
¡Hala! Ahí la tienes, báilala. Dios le dijo que para que no estuviera solo le daba una compañera, pero no le explicó los pormenores de la moza en cuestión. Además les ordenó: "Creced y multiplicaos".
Y empezaron a charlar por señas, porque todavía no se habían inventado los idiomas, y a estudiarse mutuamente:
._ ¡Anda! Somos casi iguales - dijo Adán para romper el hielo.
Entonces Eva, mucho más observadora, que para eso era mujer, apuntó con su dedo índice hacia algo que colgaba de forma inocente un poco más abajo del ombligo. Juntos le dieron vueltas y vueltas sin saber para qué podría servir aquello. Lo subían, lo bajaban, pero no fueron capaces de resolver el enigma.
Pasaron el día juntos y les entraron ganas de orinar ¡Claro, lo que colgaba servía para hacer eso!
._ Lo siento Eva, pero tú no vas a poder hacerlo porque no tienes una cola como la mía - le dijo Adán jactándose.
Entonces observó que a ella no le hacía falta lo que él tenía para hacer pis y que lo podía hacer tan ricamente por un agujerito que tenía. Esto a él no le gustó mucho pero no tuvo más remedio que reconocerlo.
Cuando hicieron caca vieron que a los dos les salía por el mismo sitio, así que eso no produjo ningún roce.
Adán sentía herido su orgullo masculino al comprobar que el trocito de carne que tenía más que ella no le servía para nada, mientras Eva le mirada indiferente.
De pronto vino Dios y les dijo que no comieran del árbol del bien y del mal, que era un manzano, porque si lo hacían los expulsaría del paraíso.
Se quedaron un poco atónitos, sin saber bien a qué se refería con lo de las manzanas. A ver, se podían comer las peras, los cocos, las naranjas... pero   Dios no les dejaba coger la fruta que más les gustaba.
Una tarde en que Eva estaba autoexplorándose, porque no tenía nada que hacer y estaba super aburrida, se dio cuenta de algo.
._¡Adán, Adán, ven... corre!!!!!  Traducido debió de ser algo así: uuuuhhhh, aggggg rrrrrr, pero chillando.
Vino lo más rápido que pudo saltando pedruscos y matojos, y la vio espatarrada.
._ ¿Qué ocurre?
._ Acabo de darme cuenta de que tengo un agujero más que tú.
._ ¡Imposible!
._ ¿No te lo crees? Pues mira, aquí está.
Y Adán miró. Efectivamente tenía un agujero más, pero ni él ni ella daban con el quiz de la utilidad del agujerito. Se pusieron a tontear, y tonteando tonteando, se percataron de que el rabito-colgante se empezaba a enderezar y a hacerse grande.
Se asustaron y empezaron a correr despavoridos hasta que todo volvió a su sitio, pero ya se quedaron mosca, sobre todo Adán, que se había puesto muy nervioso.
Así fueron transcurriendo los días, y un día a Eva le entraron unas ganas locas de comerse una manzana, así que se dirigió hacia el árbol. Él trato de disuadirla, pero ella era muy cabezota y no le hizo caso.
._ ¡Aaaahhhhhh! ¡¡¡¡Socorro, que hay una serpiente!!!!!
._ Te está bien empleado por desobediente. Anda, vamos a distraernos un poco con tu agujerito y mi colita, a ver si les damos alguna utilidad.
Y cuando estaban tan entretenidos, apareció Dios acompañado de un ángel con una espada, y los echó del paraíso.
¡Pero si no se habían comido la manzana! ¡Hay que tener un poco de flexibilidad!
Y yo me pregunto para qué le puso el agujerito de más a Eva y el muelle percutor a la colita de Adán, si no quería que lo usaran. Además, por qué otra vía se podrían multiplicar?
Y lo que me fastidia es que seamos las mujeres las paganas de esta historia. ¿Acaso Eva jugó en solitario? ¡Noooooooooo! Pues entonces, culpa repartida, porque ahora nos tocan los dos castigos: muchas mujeres se ganan el pan con el sudor de su frente y encima paren, o parían, con dolor.
Las injusticias empezaron cuando empezó el mundo. 

20 de noviembre de 2012

¿Eres una persona educada?

                     
No hay palabra como esta, que se utilice más y que la gente lance a la cara del contrario como si de un arma arrojadiza se tratara, tanto para lo bueno como para lo malo. Creo que no me equivoco si digo que NADIE se considera una persona mal educada, independientemente de su clase social o de su cultura, porque las dos cosas no tienen por qué ir unidas.
¿Pero qué es la educación? Seguramente las opiniones de los que lean esta entrada serán dispares, pero para mí esa palabra condensa tantas actitudes, que no acabo de aclararme.
Para la sociedad al uso, la buena educación será hablar y escribir de forma correcta, saber comportarse en la mesa, ser amable, no meter tacos en el lenguaje, tener cultura, no hablar a gritos... y muuuuuuuchas más cosas. Pero es que me empiezan a entrar dudas, porque ¿De qué me sirve que un hombre me ceda el paso al entrar o salir? De pequeña ya aprendí a abrir las puertas yo sola.
Tampoco tengo necesidad de que me arrime la silla a la mesa, suave y sin ruido, porque no soy minusválida. Me río yo si fuera a la inversa y a todo un caballero educado, le ayudara yo a sentarse. Pues igual de ridículo me resulta a mí, y sin embargo es un detalle de buena educación de los hombres para con las señoras.
Sin embargo confieso que me siento bien con gente que no le pega patadas al diccionario. Por ejemplo, a veces duelen los ojos al leer algunos textos por internet. ¿Pero eso es educación?
En esta vida a todo hay quién gane y reconozco que con los años digo a veces palabrotas que sonrojarían a mi madre, pero me molestan algunas otras que considero "más" taco que las mías. Tengo que reflexionar si a la gente que no las dice, pueden molestarle las mías y me consideran una mal educada.
Vamos a la mesa: todo el mundo no sabe, entre otras cosas, porque a lo mejor no ha tenido posibilidad de que se lo enseñaran, descifrar para qué sirven todos los cubiertos que a veces nos ponen en los restaurantes y el orden. Vale. Fijándose en cómo lo hacen los demás podemos salir del apuro. Pero... ¡Por favor, cuando estés frente a mí hablando, no me apuntes con el cuchillo! Más que nada por seguridad. Doy fe de personas educadísimas que se parecían a Jacques el destripador accionando el arma mientras me explicaban algo. ¿Pero no era una persona educada? Jo qué fallo, a ver si no lo era.
¿Soy más educada si me como las gambas con cuchillo y tenedor que si las pelo con las manos?. Porque a ver ¿Quién ha dejado dicho que los huevos fritos se deban mojar con los dedos y no se pueda rebañar una salsa, o que los espárragos se puedan coger y engullirlos directamente, cuando las croquetas hay que partirlas con cuchillo y tenedor? Qué incongruencia: el espárrago gotea y la croqueta no.
Una vez comí con una persona muy educada, que al pelar la naranja con cuchillo y tenedor me lanzó un chorro a la camisa. Muy educadamente se disculpó, pero ahí me dejó la mancha. Yo, que la pelé a mano, no molesté a nadie.
¡Ojo con eructar que es falta grave! A mí particularmente me molesta cuando alguien lo hace delante mío, sin embargo he comido en casas donde si no eructas, parece que la comida no te ha llenado del todo y es de buen gusto el hacerlo. También me he comido un arroz con leche sin cuchara y lamiendo con la lengua lo que se me escurría entre los dedos, porque según mis anfitriones, se aprovechaba así todo el alimento. Y estas personas eran muy educadas, sólo que su modelo de sociedad era otro.
En cuanto a levantar la voz, pues quizás cuando estoy con los de mi pueblo, compruebo que efectivamente hablan alto, por lo que yo también la subo y no pasa absolutamente nada. Cuando vivía en Argelia y tomábamos las señoras café en el Saint Georges, las francesas nos miraban con ese puntito cabroncete (perdón, por el taco, pero observad mi buena educación al aliviar la palabra cabrón) que tienen nuestros vecinos de mapa, mostrándonos lo educadas que eran ellas hablando en voz baja. Os aseguro que eran unas cursis super aburridas.
Yo creo que la educación no depende de núcleos sociales. sino de las personas, y que no tiene nada que ver con la cultura, a la que unos más que otros, han tenido acceso. Somos víctimas de unas clasificaciones absurdas de las sociedades, que dependiendo de según qué sitios, han establecido unas reglas.
Recuerdo que de pequeña me regalaron un libro que se llamaba "Urbanidad" y en él se enseñaba a los niños las cosas que se podían o no hacer, para ser una persona educada. Si lo trasladáramos a la actualidad, aquellos niños se nos antojarían ahora masoquistas o mártires.
¿Entonces qué es la educación? Uf, qué difícil es encontrar una respuesta. De momento yo aporto la palabra que me parece más importante: respeto, independientemente de los comportamientos que la sociedad nos impone a los que nos creemos, faltaría más, educados.
¡Ah! Y si alguien viene a casa a comer y se chupa los dedos o rebaña el plato porque la comida le ha encantado, que sepa que me sentiré muy feliz.
Si lees esto, por favor dime qué es para ti la educación, que estoy hecha un lío.

16 de noviembre de 2012

Galletas de jengibre



Le tenía muchas ganas a estas galletas, que las suelo comprar en esa tienda sueca que todos conocemos, y el resultado ha sido muy satisfactorio. El sabor es prácticamente el mismo y no son complicadas de hacer.
Aproveché que estaban aquí algunos de mis nietos, y sobre todo Daniel se implicó mucho en su elaboración, quizás demasiado, porque todo lo quería hacer él.

Ingredientes:
1 taza de mantequilla a temperatura ambiente
1 taza de azúcar moreno
1 huevo mediano
1/2 taza de miel
4 tazas de harina
2 cucharaditas de las de café, de canela en polvo
2          "           "    "    "     "     de jengibre molido
1/2       "           "    "    "     "    de clavo molido (yo no encontré y le trituré un poco. Quizás es demasiado para mi gusto, así que la próxima vez le pondré menos)
Una cucharadita de levadura en polvo.

Preparación:
Se mezcla la mantequilla con el azúcar y se bate hasta que se parezca la textura a una crema. Se le agrega la miel y el huevo y lo incorporamos todo bien. Cuando la mezcla sea homogénea, echamos las especias para que se mezclen bien.
Añadimos la harina tamizada y la levadura y mezclamos todo, amasando lo justo.
La dejamos reposar en el frigorífico una hora.
Encendemos el horno a 180ºC y empezamos a formarlas.
Entre dos listones de aproximadamente medio centímetro de grosor, ponemos  una porción de masa y la estiramos con el rodillo, que siempre tiene que pasar por encima de los listones. Así lograremos que todas las galletas nos salgan iguales.
Las ponemos sobre una placa de horno engrasada o sobre una hoja de silicona y las metemos al horno, que ya estará caliente, unos 5 minutos. Hay que vigilar la primera tanda para saber cuánto tiempo exactamente necesitan. En cuanto veamos que empiezan a dorar por los bordes, las sacamos.
Las dejamos enfriar sobre una rejilla para que no suden y ya las podemos comer o guardarlas, que lo segundo es más difícil, porque para guardar cuatro, pues se las come uno y ya está.
Al ser la medida en tazas no hay ninguna complicación, porque lo único que se sale de la medida es el huevo, que como ya he puesto arriba, tiene que ser mediano.
Para Navidad ya las haré con forma de muñequito y las decoraré.

31 de octubre de 2012

Una rosa negra y un buñuelo


Aunque a mí no me gusten estas "fiestas", estoy rodeada de gente que disfruta disfrazándose de muerto y rociándose de sangre, así que en honor a ellos, he hecho una rosa negra y buñuelos, para estar a tono con la festividad.
Están rellenos.............¿De qué? Pues ni más ni menos que de arroz con leche unos, y de crema otros, y doy fe que los de arroz con leche están para chuparse los dedos, la sangre y todo lo que se ponga a mano, siempre claro está, que os guste el arroz con leche.

Os deseo que salgáis de las tumbas con alegría, y que os quitéis los colmillos antes de comeros los buñuelos. Luego os restregáis el azúcar por la sangre del cuello, para que cuando algún vampiro os dé un mordisco se muera de gusto.         

Aquí os dejo algo que hice una vez sobre lo efímero de la vida.

FELIZ HALLOWEEN

26 de octubre de 2012

De dónde vienen los niños

Conversación entre mi hija y su hijo:
._ ¿Mamá, verdad que los niños los tienen las mamás?
._ Sí, claro.
._ Es que me ha dicho un amigo que los papás tienen pelos y de ahí salen los niños.
._ Mira hijo, el papá pone una semillita en la tripa de la mamá (en qué hora nombró la semillita de marras)
._ ¿Una semilla? ¿Cómo la pone? ¿Por dónde?
Mi hija, que iba conduciendo, no sabía por dónde echar con el tema y como pudo salió del trance.
Al otro día:
._ Mamá, me ha dicho mi amigo que el papá da un beso a la mamá, le pasa los pelos y se queda embarazada.
Y vuelta a la semilla.
Mi otra nieta me explicó el otro día cómo se tenían los niños: "Abuela, mi papá le metió a mi mamá una pipa por la vagina y entonces nací yo" En ese momento dudaba de a qué tipo de pipa se refería, pero finalmente me aclaró que era una pipa de girasol.
._ ¿A ti te metió el abuelo tres pipas?
._ ¿Tres?
._ Claro, has tenido tres hijas, así que te metió tres pipas. ¿Y te las metió todas juntas o de vez en cuando te metía una?
Como ellos tienen a sus padres, no seré yo la que me interfiera en estos asuntos.
El uno se queda con los pelos y la otra con las pipas, pero me llama la atención que a estas alturas andemos todavía evitando utilizar los nombres de las cosas. La vagina más o menos se nombra, pero el pene... eso ya son palabras mayores. Todo son semillas para arriba y para abajo, pero del pene no se acuerda nadie ¿?
A mis hijas, que ya están cerca de los cuarenta, cuando tenían cuatro y cinco años les compré un libro que yo creo que les aclaró bastante las cosas. Mi madre y mi suegra pusieron el grito en el cielo cuando lo vieron, porque ellas todavía andaban por París, pero yo no me arrepentí de comprarlo.
Lo acabo de encontrar, y aquí lo dejo.


 


"Aquí ves un bebé. ¿Sabes cómo llegó al mundo?"

"Aquí están papá y mamá. Tuvieron juntos al bebé". 

 

"Aquí vemos que papá y mamá no llevan ropa. Puedes ver el pecho de mamá y su rajita. La rajita se  vagina". 



"Puedes ver la colita de papá. La colita se llama miembro. También puedes ver la bolsita que papá tiene entre las piernas. Esta bolsita se llama escroto". 


"Papá y mamá se quieren mucho. Se dan besos. El miembro de papá se hace grande. Se pone muy tieso hacia arriba". A papá y a mamá les gustaría que el miembro de papá entrase en la vagina de mamá. Eso es bonito". 

 

"Papá y mamá se acuestan en la cama. Meten el miembro en la vagina. Así pueden jugar juntos. Se balancean juntos arriba y abajo. Esto se llama dormir juntos. Puede ser muy guay. Así papá y mamá pueden tener un hijo cuando quieran". 

"Papá y mamá se quieren mucho. Quieren tener un hijo. En el saquito de papá hay muchos espermatozoides. Cuando papá y mamá duermen juntos, los espermatozoides salen del miembro de papá. Los espermatozoides nadan hacia la vagina de mamá, y entran por una cueva al estómago de mamá. Esta cueva se llama útero. Aquí hay de vez en cuando un óvulo". 

 

"Pasan muchos, muchos días. Han pasado nueve meses desde que el espermatozoide y el óvulo se encontraron. El niño se ha hecho tan grande que está listo para salir". 


"La tripa de mamá se ha hecho tan grande, que ya casi no le cabe ningún vestido. 'Puedo sentir cómo se contrae el útero', le dice mamá a papá. 'Ha llegado el momento de traer al niño al mundo'". 

 


"Papá lleva a mamá al hospital". 

"Mamá se tumba en la cama del hospital. Entonces viene el médico. El médico habla con papá y mamá. El médico ayudará a mamá durante el parto". 

 

"Entonces mamá empieza a dar a luz. Primero sale la cabeza del niño por la vagina de mamá". 

"Después salen los brazos del niño". 

 

"Ahora el niño está totalmente fuera. El médico ha cortado el cordón umbilical. La placenta también ha salido. Ha nacido el niño". 

"La mamá y el niño descansan unos días. Luego vuelven a casa. Cuando el niño tiene hambre, bebe leche del pecho de mamá". 

Bueno, solo decir que este libro tiene por lo menos treinta y cinco años y que yo hubiera sustituido la palabra "miembro" por "pene", sin más, pero como mis hijas todavía no sabían leer cuando lo compré, yo les explicaba las viñetas de forma que ellas pudieran entenderlas.

24 de octubre de 2012

Flores con cucharas


Como todo lo que veo me apetece hacerlo, esta vez he probado con algo nuevo.
Un jardín muy especial. Flores de colores fáciles y baratas, porque sólo se necesita una vela y cucharas. Con el calentor se les va dando forma de pétalos y se pegan entre ellos. Las que tienen estambres, se hacen estos con los mangos de las cucharas. Para los tallos yo he añadido dos mangos, con el fin de que fueran más largos.
Si alguien se decide a hacerlo, existen bastantes videos en internet.
No dejan de ser unas flores de plástico, pero como reto no está mal, y además no se monta mucho lío para hacerlas.
Las he comprado en los chinos y en un super, pero las que tienen el plástico más duro, se manejan mejor.

21 de octubre de 2012

Mañana en el Safari de Aldea del Fresno


Antonio se había comprado un objetivo nuevo para la cámara y lo quería estrenar con animales, así que nos fuimos desde Navalagamella al safari de Aldea del Fresno a pasar la mañana.    

 Cuando compramos la entrada nos dieron un papel con las precauciones que teníamos que tomar, porque iríamos en nuestro coche. Entre otras cosas, no pararse y no bajar la ventanilla. A mí me entró la neura, porque sabía positivamente que Antonio bajaría la ventanilla para hacer buenas fotos, y yo no sabía los animales que estaban sueltos y los que no. Me venían a la mente las imágenes de una película que vi, en la que un león metía la pata por la ventanilla poniendo en peligro a los protagonistas. Seré exagerada, pero esa pata me perseguía.  Reconozco que me puse muy nerviosa y no entré, así que me quedé en la cafetería tomándome algo y estuve viendo el rincón de las aves, el de los mansos y el mini zoo.
El de las aves está muy bien, con ejemplares espectaculares, el de los mansos, sinceramente lo vi muy tontorrón, con cabras y cerdos de esos negros, que venían corriendo al vernos por si les echábamos comida, y el mini zoo, no estaba mal: pumas, tigres, monos, mapaches... Sinceramente cuatro cosillas  y el resto semi abandonado. De camino al mini estaban los emus, como el de arriba, y los avestruces, como el de abajo. Me encanta el aspecto que tienen.
Después de un buen rato apareció Antonio con el coche y me dijo que no me preocupara, que los leones, los elefantes y los tigres estaban aparte en unos terrenos cercados. Entonces, sí, le acompañé.

 Las llamas nos seguían todo el tiempo, y junto con los dromedarios no nos dejaban avanzar, pero era divertido. Vimos jirafas, cebras, monos, gamos, cebúes...Y no me equivoqué, porque Antonio bajaba la ventanilla para hacer las fotos.

 Una de las cosas que más me gustó fue la demostración de aves rapaces, que la hacían en el anfiteatro. Desde una torre que había en el monte las soltaban y llegaban hasta el cetrero que las esperaba en la pista. Alucinante la demostración de caza del águila real, impresionante el cóndor al posarse en el suelo, un águila que después de subir hasta más de mil quinientos metros, se lanzó en picado ante la presa que le mostraba el adiestrador. Una exhibición para quitarse el sombrero, y el cetrero una persona con un dominio total sobre las aves.

 Aquí estoy con un halcón, que me miraba muy fijamente. Demasiado fijamente.

 Aquí estábamos parados al lado de los cebues, y yo con los ojos cerrados porque la ventanilla que estaba abierta era la mía. Reconozco que pasé miedo.

Estos pajaritos me encantaron. Había una pajarera llena de ellos.

 Estos también estaban al lado del camino. Yo le decía a Antonio: "Por Dios arranca, que como nos meta el cuerno en el coche  nos levanta". Él se reía de mí, pero a mi me impresionaba ver tan cerca, y suelto, semejante animal.

Este tigre estaba en el mini zoo, y era más fácil de fotografiar que los otros. Los leones, los elefantes y los tigres estaban super protegidos por una vallas altísimas. Tenían mucho terreno. Los leones, he leído que ocupaban una hectárea.
En la primera foto estoy con un cachorro de león en brazos. Su madre lo rechazó porque tenía problemas en una pata, así que lo están alimentando con biberón.
Fuimos también a ver los cocodrilos, y sin dudarlo, es lo peor del parque. Si no entiendo cómo en pleno centro de Madrid mantienen a esos animales con tan poco espacio y con tan poca luz, aquí lo entiendo menos, ya que están en una especie de pasillo, con una pasarela por el centro para las personas. Es agobiante verlos tan juntos en un espacio tan reducido.
Cuando ya nos hartamos, es un decir lo de hartarse, de hacer fotos, nos quedamos a comer allí y luego nos volvimos a Navalagamella.

15 de octubre de 2012

Ojiplática en el chino

Algunas veces me gusta ir a  las tiendas de los chinos para practicar mi deporte favorito, que es "palpar". Comprar no compro mucho, pero me encanta tocarlo todo.
La semana pasada entré y me puse donde están los bolsos, a sacarlos, abrirlos, colgármelos... la mar de entretenida andaba yo, cuando de pronto oigo que me llaman:
._ Señora por favor.
Miré hacia el sitio de donde venía la voz y encontré a un hombre de mediana edad con una mochila de esas de color verde, cuadrada, colgada en bandolera.
._ ¿Si?
._ ¿Le gusta este bolso? - Me dijo señalándolo.
._ Bueno, no sé... depende para lo que lo quiera.
._ Si usted me viera por la calle con él pensaría que soy maricón?
La chinita que era joven y hablaba perfectamente español, me miró y soltó una carcajada, pero yo me la tuve que aguantar porque lo tenía de frente.
._ Y por qué tenía  pensar eso?
._ Pues porque a lo mejor aquí los llevan los maricones.
._ ¿Pero usted es maricón?
._ Yo no, pero a lo mejor me confunden con uno si me lo pongo.
._ Y si usted no es maricón, qué más le da lo que piensen los demás?
._ Es por mi mujer ¿Sabe?
._ ¿Qué?
._ Que a lo mejor cuando me lo vea puesto lo piensa.
._ Pero bueno, su mujer sabrá de sobra si usted es o no es maricón - vamos, digo yo.
._ ¿Me llevo el verde o el marrón?
._A mí me gusta más el verde.
._ Pero no le parece que el color marrón es más de hombres?
Empecé a pensar si es que a lo mejor era maricón y se esforzaba por disimularlo.
._ ¿Y por qué se lleva este tipo de bolso si tiene tantas dudas? - le dije aguantándome la risa como pude.
._Porque quiero que me quepan documentos. Voy a viajar y necesito algo para llevarlos y no tener que abrir la maleta.
._ Pues ese me parece ideal.
Como era sudamericano di por hecho que viajaba con bastante equipaje, así que me explayé diciéndole que podía facturar una maleta, meter otra pequeña en la cabina y llevar en la bolsa otras cosas que necesitara en el momento.
._Señora, cree que en este bolso me cabrán ocho móviles?
Aquí la china ya se revolcaba y además no podía contenerse, pero es que encima me miraba y yo ya no sabía qué hacer. Solo se me ocurría buscar por allí a ver si encontraba alguna cámara oculta.
._ ¿Pero no la quería usted para documentos? Es que yo no sé si le van a dejar pasar ocho móviles.
._ Eso pienso yo también. Puedo meterlos en la maleta que facture, que esas no las miran. ¿Usted lo haría?
._ Lo siento, pero a mí es que no se me ha ocurrido nunca pasar móviles. Como mucho he pasado un chorizo.
._ ¡Ah! ¿Pero se puede pasar comida?
Aquello no tenía fin, y entonces miré a la china que seguía pasándoselo en grande...
._ Mire Señor, eso más que nadie se lo puede aclarar esta señorita, - dije señalando a la china que se quería meter bajo tierra - que seguramente sabrá mucho de viajes.
._ ¿Sí? Pues voy a preguntarle a ella y de paso le voy a preguntar también si le gusta más el verde o el marrón. Más que nada por tener dos opiniones.
._ Nada, nada. Le dejo en buenas manos. Que tenga un feliz viaje -dije mientras me iba hacia la puerta.
A la china se le pusieron los ojos redondos. Entonces me volví y le hice una sugerencia:
._ Señorita, muéstrele a este señor unas cuantas mariconeras para que compare.
._ Sí, sí...dijo entusiasmado.
Y antes de que la china me asesinara, me fui a paso ligero.


7 de octubre de 2012

Pollo con coca cola

Este plato unas veces lo hago con pollo y otras con costillas de cerdo. De las dos formas está buenísimo.
Queda jugoso, sabroso, y las patatas dicen comerme. Si a eso le añadimos que es muy fácil de hacer, pues ya tenemos un plato estupendo.

Ingredientes:
3 traseros de pollo
1 sobre de sopa de cebolla Knorr
Una lata de coca cola (que no sea ligth)

Preparación:
Se pone el pollo partido en muslos y contras, en la fuente de horno.
Se vierte por encima el sobre de sopa de cebolla.
Se añade la lata de coca cola y se mezcla bien todo.
Se pone a horno medio noventa minutos. A la mitad del tiempo, se le da la vuelta a la carne.
 Y ya está.
Si le añadimos patatas, lo hacemos ya desde el principio y están deliciosas.

6 de octubre de 2012

El mundo contra mí.

Esa es la sensación que tengo en el verano.
Yo había perdido unos kilos y estaba "casi" perfecta allá por abril. Me marché una semana a Turquía y ya se empezó a estropear la cosa. Luego estuve unos días en Nerja, y entre pescaíto por aquí, berenjenas con miel de caña por allá, cervezas a gogó, postres riquísimos y desayunos, el "casi" se fue quedando en "casi ná".
Un mes en Torrevieja con aperitivo diario, comidas en casa de amigos, comidas de amigos en casa, helados de cierta marca comercial que no me da la gana de nombrar porque no me paga, en el frigorífico, las siestas, las bandejas de dulces que me regalaban... ¡Un asco!
Un asco de cremalleras y de botones que ya cerraban porque no había más remedio, pero de muy mala leche.
Y me vine para casa pensando que todo iba a cambiar porque aquí ya no dependía de nadie y comería lo que yo decidiera. Sí... sí... sí...
Me fui al cámping de la sierra porque aquí hacía mucho calor, y ha sido lo peor de lo peor.
._ Carmen, quieres una cerveza?
._ Carmen, quieres un vermouth?
._ Carmen, ven a tomar café que he hecho una tarta riquísima.
._ Carmen, bebe clara del porrón que está muy fresquita.
Y es que todo sabe tan bien cuando me lo sirven...
Por si faltaba algo, la reunión guineana que este año ha sido en San Pedro del Pinatar. Una semana, todo el día con gente  y comiendo cosas que claramente sé que son pecado. Pero como lo mío es pecar...
¡No hay derecho! Si digo que no quiero, que no me lo repitan porque a la segunda ya caigo. La gente me provoca. La culpa no la tengo yo. La tienen los demás, que se empeñan en que cambie de talla todos los años y encima lo consiguen.
¿Y ahora qué? ¿Cómo estiro los pantalones para que me entren? Los puedo llevar con la cremallera sin subir y con un letrero que ponga que yo no tengo nada que ver con eso, que he sido un daño colateral.
¡Qué difícil resulta vestirse a la vuelta de las vacaciones!

24 de septiembre de 2012

Álbum de fotos con papel de pared

Este álbum tiene las tapas y las guardas de papel procedente de muestrarios de los que tiran las casas de papeles pintados. Está cosido con la técnica mudéjar y las hojas interiores son de cartulina del mismo color marrón de la flor.
La tapa posterior sigue sin cortar al lomo, cuya unión con la tapa anterior lleva el adorno de una cinta de rafia marrón oscuro como la cinta del cosido.
Un álbum para tiempos de crisis.

Tercer día en París


Después de un suculento desayuno, ya que la mañana se presentaba andarina, cruzamos a Rívoli para llegar por esta calle a la Plaza del Ayuntamiento de París. El paseo mañanero fue muy agradable por la temperatura, y porque esta calle me encanta.
L'Hotel de Ville, como se llama, es un palacio renacentista que en 1871 sufrió un incendio y fue reconstruido entre 1873 y 1882



En su fachada hay 108 nichos con personajes de la historia de Francia y su plaza se utiliza muy a menudo para eventos, tales como conciertos o exposiciones. Precisamente estaban preparando una. Bajo del reloj, en las tres cornisas se puede leer "Égalite, Fraternité, Liberté".

Esta foto es de internet (de libre dominio), y da una idea de lo grandioso que es el palacio.

Esta es una vista de la parte que da al Sena.


Del Ayuntamiento seguimos por la Rue Rénard hasta el Centro Georges Pompidou y esto fue lo primero que vimos: es difícil de describir la sensación que se siente al ver todo este tinglado de tubos y de hierros de colorines, especialmente si se mira desde una calle no demasiado ancha. Parece que se te vienen encima.

Con todos mis respetos para los arquitectos, he de decir que me parece una tomadura de pelo.

Una de las bonitas salidas de aire. El Georges Pompidou es obra (para bien y para mal) de Renzo Piano y Richard Roger. Lo digo mayormente por si alguien quiere encargarles la decoración de su casa de la playa.
El Museo Nacional de Arte Moderno de París fue inaugurado no sin algún soponcio de los presentes, el 31 de enero de 1977, y alberga una de las mayores colecciones del mundo.
Es el tercer sitio más visitado de París (no me extraña).
Aquí estoy en la plaza, que tiene mucha vida y se hacen actividades relacionadas con el centro.

Delante de la fuente de los inocentes, un poco más arriba del museo. Era un antiguo cementerio y la fuente estaba adosada a una de las paredes de la iglesia. Al derruir esta, hubo que hacer la parte que faltaba para que quedara el templete cuadrado.
Y nos vamos bajando por la Rue Rambutean hasta la Plaza de los Vosgos.

Como se puede ver, se encuentra el el distrito 4 de París.

Esta estatua de Luis XIII se encuentra en el centro y fue el cardenal Richelieu quien mandó ponerla aquí, aunque no es la primitiva ya que esta fue destruida durante la revolución.
Está aquí este señor porque la plaza se inauguró en 1612 para celebrar su boda con Ana de Habsburgo, aunque nunca vivieron aquí.

Una vista de los soportales.

No, no me he subido a un helicóptero para hacer la foto, pero es que se ve muy bien y no me he podido resistir.
Fue el primer ejemplo de ordenamiento urbano en Europa. Aquí vivieron por ejemplo, Víctor Hugo y Richelieu.

De allí nos fuimos a la Plaza de la Bastilla. La columna de Julio.
Luego nos fuimos andando hasta el apartamento para comer.

Voy a bajar por una quiche y unos macarrons.

Y después de la comida, la siesta estupenda que nos sentó de maravilla.
Por la tarde nos pusimos muy guapos y tomamos en la Plaza del Louvre el 72, que nos llevó hasta...¡Montparnase! Con dos meses de antelación habíamos reservado una cena en el piso 56 de la torre.
Llegamos y el ascensor se tragó literalmente en pocos segundos, muy pocos, los 56 pisos.

Empezaba a anochecer y los colores grises se mezclaban con los rojizos del cielo y de la Torre Eiffel iluminada. Felicito al fotógrafo, o sea a mi Antonio, porque hizo una foto preciosa.

La vista que teníamos no podía ser más bonita. Cenamos de primero foie y de segundo carne. Tomamos de postre una tabla de quesos, que más que tabla era un tablón, y de beber vino blanco.
Es una sensación preciosa tener París a los pies.

A la izquierda la Torre Eiffel y a derecha Los Inválidos. La ciudad de la luz, haciendo honor a su nombre.
Cuando terminamos tomamos un taxi y nos marchamos al apartamento.
Mañana seguiremos descubriendo París.