Bienvenidos a El mirlo de papel

Soy Varech y ando por la Red desde hace un tiempo, lo cual me produce a veces quebraderos de cabeza aunque la mayoría de las ocasiones me satisface.

29 de mayo de 2012

¿Para qué sirven los padrinos?


Cada día me convenzo más de que no sirven para nada los padrinos de los bautizos.
He leído, que el papel que tienen, según la Iglesia, es el de vigilar que sigan practicando el catolicismo, y al mismo tiempo procurar que sean unas personas de bien. Aparte, si los padres fallecen, hacerse cargo de él.
Empiezo por decir, que si uno decide bautizar a sus hijos hay que ser coherente y hacerlo porque se esté convencido de que se les quiere administrar este sacramento, y no por el fiestorro que la ceremonia significa, que la mayoría de las veces es así.
Ahora bien ¿Cuántos padrinos se ocupan de sus ahijados? Yo no conozco ninguno. Incluso soy madrina de una niña a la que después del bautizo vi pasados más de quince años, por lo que me pongo en cabeza de esta incoherencia.
Tengo tres hijas. La primera fue bautizada por unos amigos, casi hermanos, con los cuales seguimos manteniendo un trato estupendo, independientemente de que sean o no padrinos. La segunda es ahijada de otros amigos, de los que no recuerda ni la cara. Y la tercera, pues otros amigos de los cuales él desapareció y no tenemos ni idea de por dónde puede estar, y ella una de las "amigas desaparecidas", que más vale que no vuelva a aparecer otra vez en nuestras vidas.
Quitando los de la primera, los otros no sabrán nunca las necesidades que puedan tener sus ahijadas. No saben nada de ellas.
¿Si por lo que fuera los padres hubiéramos fallecido, se habrían hecho cargo de ellas? ¡Dios les libre! Para eso, mejor la familia, que siempre está ahí.
Yo voto por quitar los padrinos de bautizo. Si hay que tenerlos se tienen, pero tenerlos pá ná...

24 de mayo de 2012

Tarde de atrezzo

Hace cinco años compré en un mercadillo un teatro infantil, y no pude hacer mejor compra. Me costó la friolera de ¡Un euro! Tiene su telón que sube y baja con la ruedecita superior derecha, tres botones (risas, aplausos, pitos), y era una maletita que yo "arreglé" para que fuera más cómodo hacer los cuentos.
Encontré los personajes de Caperucita y de La casita de chocolate, pero he ido poco a poco ampliando los personajes, aunque de forma casera, que me gustan más.
Necesitaba unos reyes para interpretar a los padres de La bella durmiente y de Blancanieves, y como tenía por aquí unos barriguitas modernos (qué diferencia con los antiguos), a los que los niños no les hacían ni caso, pues los he vestido y les he puesto la corona. ¡Ya tengo reyes! Y claro, he completado la escena con la criatura y la cuna.
Me he divertido muchísimo haciéndolo, y sé que a mis nietos les va a entusiasmar. En cuanto llegan a casa se meten a su habitación y se sientan ya a la espera del cuento correspondiente, cuento que a veces me invento e incluso a los clásicos procuro meterles siempre algo nuevo para despertar su interés.
Pues eso: tarde de atrezzo.

21 de mayo de 2012

¿Justicia? ¡Venga ya!

A esta pobre chica la raptan, maltratan, violan, queman y matan, cuatro hijos de puta, de los que tres ya están en la calle. Hay que ponerse en el pellejo de los padres para entender su indignación.
Los que tenemos hijos, si algo así nos pasara, quisiéramos que nos dejaran a estos tipos para poquito a poquito, torturarlos hasta verles cómo se retuercen mientras agonizan. Ni aún así pagarían el dolor causado. Entran ganas de comprarse una pistola y plantarse a la puerta de la cárcel, para pegarle cuatro tiros a estos cabrones, aunque pasáramos el resto de nuestra vida en prisión. Porque nosotros iríamos a prisión, al contrario de los que les ocurre a los asesinos. ¿No vale nada una vida? ¡Qué barato sale matar en este país!
La justicia sería que sus padres vieran cómo se pudren estos hijos de puta entre rejas, aunque nadie les pudiera ya devolver a su hija. Al dolor tan enorme que supone una muerte así, se añade la impotencia ante la "actuación" de la justicia (en minúscula).
¿Para cuándo el cambio de la ley del menor?
Dejo aquí las fotos de dos de los asesinos, y los nombres, para que todos sepan quiénes son.

Rafael García Fernández, El Rafita, miembro de la banda El chupete. Contaba con 14 años en el momento de su detención. Tenía antecedentes por haber disparado con una escopeta de perdigones a cuantos pasaban por una avenida de Villaviciosa de Odón, llegando a herir a varios viandantes que requirieron de asistencia sanitaria. Por el caso del asesinato de Sandra Palo fue acusado de secuestro, violación y asesinato y puesto en libertad del Centro de Internamiento El Renasco de Carabanchel, tras cumplir 4 años de condena.
Volvió a delinquir.



Ramón Santiago Jiménez, Ramón y José Ramón Manzano Manzano, Ramoncín, ambos de 17 años, detenidos a finales de junio de ese mismo año en sus domicilios de la Cañada Real y Alcorcón. Fueron sentenciados a cumplir 17 años de internamiento. Cumplen condena desde octubre de 2003.
Ramoncín ha salido hoy, protegido en un furgón policial.


Francisco Javier Astorga Luque, apodado El Malaguita por haber nacido en dicha ciudad, detenido el 12 de junio en el Puente de Vallecas (barrio de Madrid) tras robar un vehículo y atropellar a un peatón. Fue condenado a 64 años de prisión por tres delitos de violación y uno de asesinato con los agravantes de alevosía y ensañamiento.


MI CORAZÓN Y MI ABRAZO PARA MARÍA DEL MAR BERMÚDEZ, POR SU LUCHA INCANSABLE

Triste historia de una patología lela

De forma brusca se encendió la luz y desperté del profundo sueño en el que me hallaba sumido. Hacía mucho frío, pronto sentí el contacto húmedo de una cebolla atravesando mi piel, ya a estas alturas, muy débil. Miré a mi alrededor y encontré una gran desolación: Cherry, con su cuerpo reventado, llegó hasta Carlota, que como podía luchaba por zafarse de su cruel destino. Clementina, con un más que evidente deterioro, se apoyaba en Navelina, cuya tristeza ya no se esforzaba en disimular. Flora, desde lo alto, nos miraba con infinita piedad intuyendo el cruel desenlace que nos esperaba, pues sabía que nuestra enfermedad no tenía cura. Don Simón aguardaba impasible el paso de los días, observado de cerca por alguien de Burgos, cuya cuenta atrás había comenzado.
¡Y alguno mutaba! A un paquete de aluminio le salieron ramas, transformándolo en una extraña criatura. ¡Qué pesadilla!
¿Quién me iba a decir a mí, hermoso calabacín, que acabaría abandonado en el cajón de una nevera? Me compraron con gran ilusión, me eligieron gordo y brillante, y ahora estoy junto a mis compañeros, aquejados de alelopatía. Sí, feo nombre, y encima cruel, porque es tan contagiosa que ni el abrazo del amigo o el hermano puede consolarnos. ¡Hortalizas y frutas... os quiero!
Somos pocos en la estancia y el eco devuelve nuestros lamentos.
El pájaro ha abierto la nevera tras un largo viaje, y su primera frase ha sido: "¡Huele mal!" Nos ha pasado revista uno a uno, y hemos sido lanzados sin miramiento al cubo de la basura desde el cual estoy escribiendo. Ha lavado con ahínco los cajones para que no quede rastro de nuestra enfermedad, y otros compañeros tersos y brillantes ocupan ahora el sitio que nosotros dejamos. Pero ¡Ojo! Que no se hagan ilusiones, porque en cualquier momento el pájaro volverá a viajar y se repetirá la historia.
La cruel y triste historia de un calabacín podrido.

12 de mayo de 2012

Sexo para todos los gustos


Hoy ha caído en mis manos un tratado sobre parafilias, y me he quedado a cuadros al ver lo raritos que podemos llegar a ser. Si al leer esta entrada alguno se siente ofendido por el adjetivo, pues lo siento, pero es que hay cada cosa que parece de chiste.
Ahí van algunas perlas:
Axfisiofilia ---Atracción por axfisiar, ahogar o estrangular a la pareja durante el acto sexual, con su consentimiento y sin llegar a matarla. (Qué detalle lo de no matarla)
Autopederastia---Hombres que encuentran placer introduciendo el pene en su propio ano (A ver, que me lo imagine...no apto para penicortos)
Clastomanía---Excitación al romperle a la pareja la ropa que lleva puesta (Mientras pague lo que rompa...)
Clismafilia---Placer sexual obtenido al inyectar líquido en la cavidad anal. Se incluyen enemas. (¡Dios Santo! Todos sabemos lo que pasa después de un enema)
Coprofilia ---Excitación sexual producida por heces (¡Madre mía, qué bonito!)
Electrofilia ---La excitación que se produce al usar choques eléctricos. (Esta relación será breve, porque con una vez que metas los dedos en el enchufe, ya llegas al clímax)
Aerofilia ---La líbido se dispara al volar en avión helicóptero, globo o ala delta (Lo que se llama una paja aérea)
Emetofilia ---La excitación se produce por el vómito, ya sea viéndolo , induciendo a otros, o haciéndolo. (No especifica qué alimentos tomar con anterioridad. Digo yo que la excitación será mayor si se vomita por ejemplo sandía, que espinacas.Por el cromatismo mayormente)
Flatofilia ---Atracción sexual por las flatulencias propias o de la pareja. (Aquí debería ser obligatorio especificar los alimentos comidos previos al acto)
Formicofilia ---Excitación sexual al reptar hormigas, caracoles, gusanos u otros animales pequeños, sobre los genitales. (¿Lo harán con mosquitera? No me quiero imaginar el resultado)
Furtling ---La líbido se pone al cien al introducir el pene a través de un agujero cortado en la zona genital de una foto o dibujo. Existe también en su versión femenina, lo que se conoce como fúrtling regresivo o inverso y consiste en incorporar un pene artificial a la foto o dibujo, para que pueda ser introducido. (¡Ojo! No pone nada de ampliar la foto, pero es obvio. La versión femenina me ha llegado al alma, porque se supone que ella tiene que "componer" la puesta en escena. Es injusto: él sólo tiene que hacer un agujero, y en cambio ella tiene que calentarse la cabeza en los materiales de la manualidad, tamaño, forma, etc, y por si fuera poco, cómo sujetarlo a la foto)
Hirsutofilia ---Atracción por el vello. (Mujeres peludas, buscadles, que es una gozada no tenerse que depilar. Su lema debe de ser: donde hay pelo hay alegría)
Somnofilia ---Tener relaciones sexuales con una persona desconocida mientras aquella duerme. (Pues ni que tuviera el chichi como la Puerta de Alcalá, para no enterarse)
Misofilia ---Excitación al contemplar la ropa sucia (Con los montones que se hacen en mi casa, es una pena que no nos haya dado por esto)

Bueno, pues son unos pocos ejemplos de lo complicadas que pueden ser las relaciones sexuales.
Y lo más divertido es que aunque hagamos gala de que el sexo es algo natural y que nada puede extrañarnos, a ver quién es el valiente o la valienta ( que diría algún progre), que reconoce abiertamente tener una de estas parafilias.

9 de mayo de 2012

Reflexiones de una maleta harta


Hola, soy la maleta del Mirlo y cada vez me agobio más cuando me llena con un equipaje, según él imprescindible. Intento hacerle ver que padezco de sobrepeso, que la cremallera no me cierra y que puedo estallar en cualquier momento, pero ni por esas.
¡Por Dios! Que aunque vayamos para una semana, vamos más prevenidos que el Juan Sebastián Elcano cuando da la vuelta al mundo.
A ver: es normal que lleve fortasec, tiritas, almax, paracetamol... pero... no se conforma con eso. Imprescindibles las lágrimas artificiales por si a su Antonio o a él se le secan los ojos, cosa que de momento no debe de haber sucedido, ya que las traemos tal cual las llevamos. ¡Ah! Y Aciclovir, por si le sale una pupa en la boca. Teniendo en cuenta que le salen una o dos al año, puñetera casualidad sería. El cacao que no falte por si se le cortan los labios (hay un tubo en el botiquín, que sólo sale cuando viajamos, y está sin estrenar). Y el stick de los chichones, por si un casual.
No se mueve a ningún sitio sin tapones para los oídos: dos pares. Que el ruido en un hotel puede arruinarle la noche y ya que paga, al menos que duerma.
¿Y las toallitas? Las lleva para todos los menesteres. Atentos:
Húmedas, por si se tiene que restregar las manos. (sin destapar)
Higiénicas, por si en algún servicio no hay papel (sí, también lleva kleenex, pero da lo mismo).
Húmedas, íntimas. Como doscientas, que al tener que abrir la maleta, se le vinieron encima al responsable del control, totalmente descontroladas.
Salvaslips, por si hay problemas con la ropa interior. Acompañan en el descontrol a las anteriores.
Añadimos un secador de pelo, porque en una ocasión fue a un hotel que no tenía, y por si acaso lo llevamos fijo, y con el difusor, que lleva años sin usarlo, pero ¿Y si le da por rizarse el pelo y no lo tiene a mano? Lo de los peines también tiene lo suyo: tres tipos de cepillos, cuando en casa solamente usa uno. Pero siempre lleva el trío.
Que no nos falte la crema de día y la de noche, tan necesarias ellas. ¿Las usa en casa? ¡NOOOOOOOO! Y en los viajes, soy testigo de que ni las saca de la bolsa de aseo, pero le debe de molar el bulto que hacen.
La colonia no le gusta, pero SIEMPRE llevamos una botella, por si le da la vena y se echa.
Y el caso es que cada vez que volvemos, siempre dice que es la última vez que sale con cosas "superfluas". ¿Qué entenderá este pájaro por cosas superfluas?
Bueno... y lo de los antifaces es ya de lo más fashion. Lleva dos, cual de ellos más hortera. No me extraña que su Antonio no quisiera ponerse el que lleva dibujado un par de ojos enormes.
Apartado maquillaje: lápices de tres colores, cuando usa siempre el mismo color. Base satinada, que sólo se la pone la primera noche, para dar una primera impresión guay del Paraguay, pero que luego ya le trae al fresco y la olvida. Desmaquillador de ojos, cuando con la toallita desmaquilladora se pega un restregón general de mala manera, si se lo pega. Laca y espuma de viaje, que no se pone, pero conviene llevarlas.
De vez en cuando, si se le antoja, usa las gafas para ver de lejos... ¡Pues dos! Por si un par se le pierde. Y las de sol, lo mismo. ¡¡¡¡Cuatro pares!!!! Y el líquido de limpiarlas, que no lo usa nunca, porque le van los cristales esmerilados, pero llevarlo lo lleva, faltaba más.
Relojes varios, aunque siempre lleve el mismo.
¡Estoy que reviento!
¡Uy! Que se me olvidaba el paraguas y los chubasqueros por si llueve. Las dos cosas, porque no está seguro de cual de las dos se le ocurrirá usar. Y digo yo, que si se diera el caso de de que lloviera ¿No puede comprar uno, que vale cuatro perras y me ahorra el peso?
Bueno, y llevamos también un costurero equipadísimo, con sus tijeras y todo. Anda que no le costó al del control dar con ellas. Se habían mezclado con las toallitas descontroladas.
Útimamente hemos agregado también el gel desinfectante. Lo lleva en la bolsita de avión transparente que ha comprado. Doy fe de lo útil que le ha sido. Ni un solo día lo ha usado.
Lo de la estación del año no va con él. Si es verano, algo de invierno y viceversa, porque nadie sabe con lo loco que está el tiempo, lo que puede pasar. Carga con chaquetas ligeras, medianamente ligeras, nada ligeras y de abrigo. Pero luego se pasa todo el día quejándose de que no ha cogido la adecuada. La madre que lo parió.
Y lo de los pañuelos, ji ji ji ji... un puñao, pero como no los echa al bolso, en una mezquita tuvo que coger de un cesto uno muy poco favorecedor que habría cubierto ya las cabezas de los turistas llegados a Estambul en los últimos diez años. Le quedaba como un tiro, y no es que me alegre del mal ajeno, pero le está bien empleado.
Este pájaro me deja sin fuerzas. En el último viaje no pude más y reventé. ¡Qué descanso!



6 de mayo de 2012

Mensaje para María Clara

Era mi madre. Una persona que sin merecerlo, fue muy desgraciada.
Cuando a mi padre lo eligieron para llevar una empresa importante, su día a día sufrió una mejora significativa y tuvo una vida normal, con altibajos, como todo el mundo, hasta que el veinticinco de agosto de 1968, cuando tenía 57 años y mientras sacábamos unas cosas del trastero, sus extremidades dejaron de moverse y de una manera fulminante pasó de ser una persona muy activa, a no poder valerse por sí misma.
Días en coma, angustias, nervios... pasó el peligro, pero quedó dañada para siempre.
Nos dijeron los médicos que ante cualquier contratiempo le podría repetir el derrame cerebral, pero se equivocaron. Aguantó como una jabata la marcha de mi hermana con tan solo 40 años, y la de mi padre. La muerte de ambos se produjo en el espacio de 20 días. Y ella siguió al pie del cañón.
Estando mi padre ya agonizando, la sacaron de mi casa para ir al entierro de mi hermana, y cuando volvió, para evitar que su marido sufriera, le ocultó la muerte de su hija, e hizo que en una casa vecina le quitaran el luto. Así, hasta que él también se marchó.
Vivió durante 35 años más, en el transcurso de los cuales sus problemas de salud se acentuaron debido a la edad.
Creo que tuve una madre muy valiente al decidir, que no resignarse, a seguir viviendo a pesar de que no tenía ninguna calidad de vida.
Nunca creí que me acordaría tanto de ella como me acuerdo. La tengo presente, le hablo, me río con ella... porque sé que está conmigo. Tenemos una complicidad difícil de explicar.
Su nombre fue María, pero en los papeles le ponían su segundo nombre, que nunca usó. Yo se lo decía a veces para intentar sacarle una sonrisa.
Siempre me rondó la duda de si mi comportamiento con ella fue el adecuado, si le di todo el amor que se merecía, porque la convivencia en esas circunstancias tan duras a veces era difícil. Me acuerdo mucho de ella y aunque ya no esté, vive en mi corazón.
Maria Clara, sabes que te quiero.

3 de mayo de 2012

El viaje a Nevsehir

Vista del aeropuerto minimalista.



Llegó el día y con más equipaje de la cuenta, "por si", nos fuimos al aeropuerto. Una vez las maletas facturadas nos dirigimos a una oficina de cambio para proveernos de liras turcas, aunque no nos habría hecho falta, ya que tanto el guía que llevábamos como el hotel, nos las cambiaban sin problemas. Además nos habría salido más ventajoso.
Como viajamos en una compañía de bajo coste (FreeBird), pensaba que no tendríamos comida, así que hice unos sandwichs y los eché al bolso de mano, que entre paraguas y otras cosas "necesarias", jajajajaja......pesaba un egg.
Aunque me habían dicho que a Turquía se podía entrar sólo con el carné de identidad, el pasaporte lo tuvimos que enseñar en varias ocasiones, por lo que si pensáis visitar este país, que no se os olvide.
Me repatea la fase del desnudo en los aeropuertos. Hasta las botas me hicieron quitar. Y encima pito por el arco. ¿Qué culpa tengo yo de que me pite el sujetador?
Por fin entramos en el avión y notamos un olorcillo a pollo asado que, dada la hora, hizo que los jugos gástricos se pusieran en marcha.
Nos acomodamos (es un decir, porque el sitio era estrechísimo. Justo el sitio de un fémur corto. La rótula ya tenía que acoplarse donde pudiera) y empezaron a salir pantallitas para ilustrarnos sobre la seguridad aérea. ¿Dónde ha quedado la imagen de la azafata, envidia de las señoras, brazos adelante, a los lados, chaleco, mascarilla...........? Aunque no se le preste mucha atención, resulta más cálida su presencia que la pantallita tan aséptica.
En un español..............difícil de reproducir, una auxiliar nos informa sobre los pormenores del vuelo, y entre otras cosas nos dice que van a darnos comida caliente. Una, como es antigua, asocia la comida caliente con el puchero, y me quedo expectante.
Despegamos sin problemas y las pantallitas se convierten en navegadores, que señalan en todo momento el lugar donde se encuentra el avión. Me distrae bastante el vuelo y puedo ver Estambul desde la ventanilla del avión. ¡Qué ilusión!
¡Qué hambre!
Salen las azafatas con el carrito y nos dan la comida: pollo asado (el olfato no nos ha mentido) con un arroz de granos gordísimos, ensalada ni fu ni fa, quesito, mantequilla y pudin de postre. Luego café chungo. Como el estómago ruge, nos lo comemos y bebemos todo, "por si". Nunca se sabe.
Después de más de cuatro horas nos avisan que vamos a aterrizar en el aeropuerto de Nevsehir.
¡Pero si no se ve ningún aeropuerto!
Aunque parezca que no, lo hay, y el avión aterriza en una carretera ancha. Menos mal que el piloto es competente, porque han faltado cincuenta metros para que la "pista" se acabara. ¡Uf!
¿Y ahora a dónde vamos? ¿Al campo? Ah, no, que se abre para poder dar la vuelta por la misma pista. La damos y nos quedamos cerca de las instalaciones. Bajamos y hacemos la cola para acoquinar los 15 euros del visado. (Rajoy, tome usted nota de cómo recaudan en otros sitios).
Antes estaba nerviosa por si se me despistaba el representante de la agencia con la que había contratado el viaje, pero ahora sé que está chupao encontrarle. Sólo hay una sala y una puerta.
Y allí está esperándonos Sadat, que nos acompañará toda esta semana para mostrarnos un país de profundos contrastes. (Qué chula me ha quedao esta frase)
Subimos al autobús y vemos con sorpresa que sólo somos quince personas en el grupo, lo que nos augura una mejor organización en las excursiones, y más comodidad en los desplazamientos largos que se nos avecinan.
Llegamos al hotel Cristal Kaymakli, en Capadocia. Cenamos y empiezo a comprobar que la comida turca no es nada fácil de elegir en un buffet. ¿Hay algo que no pique? ¡¡¡¡NOOOOO!!!!! Sin embargo los dulces están buenísimos y me pongo morada. Mi Antonio tampoco se queda atrás. Salimos a dar una vuelta, pero en vista de la marcha que tiene el pueblo, decidimos volver al hotel. Bueno, vamos a acostarnos pronto, que mañana hay que levantarse a las cuatro para disfrutar del amanecer sobre estos parajes................desde un globo.

2 de mayo de 2012

Los amigos "perdidos"


He leído hoy en facebook algo que me ha hecho reflexionar:
A un sabio le preguntaron: "¿Por qué se pierden los amigos?" Y el sabio contestó: "Los amigos no se pierden, y si se pierden es porque no eran amigos".
Como mucha otra gente, he sufrido en carne propia la "pérdida" de algún amigo, y después de hacerme muchas preguntas sobre la razón de esa pérdida, llegué a la conclusión de que desperdicié mi tiempo, mi cariño, mi trabajo y parte de mi misma en alimentar una amistad que no fue recíproca.
Es duro darse semejante batacazo después de compartir tantas cosas y, de hecho, lo pasé muy mal porque no podía entenderlo. Su comportamiento me pareció tan injusto, que esperé durante meses una rectificación que nunca llegó. ¿Esos eran mis amigos? Prefiero los enemigos, frente a los cuales me encuentro preparada para cualquier cosa. Este tipo de "amigos" te pillan por sorpresa y como no seas fuerte te puede hundir.
Muchas películas de video juntos, muchas fotos de viajes y montones de recuerdos compartidos, hicieron difícil separarlos de mi vida, pero su presencia ya no me duele. Salieron y nunca volverán a entrar en ella. 
Soy una persona muy afortunada por la cantidad de amigos que tengo. De algunos me separan muchos kilómetros, que no impiden que yo sepa que están ahí, al igual que ellos saben que siempre los tengo presentes y que los quiero. A pesar de los años transcurridos, conservo intacto el cariño hacia ellos.
Si alguno se perdió, es porque nunca lo fue. En eso estoy de acuerdo con el sabio.

1 de mayo de 2012

Al regreso de Turquía

Teníamos muchas ilusiones puestas en este viaje, y ha superado nuestras expectativas. Hemos disfrutado preparándolo y le hemos sacado todo el jugo una vez allí.
Poco tiempo para tanto que ver, pero una buena planificación ha hecho posible que nos trajéramos en la retina y en la memoria, los rincones más bellos y los monumentos más impresionantes de este país de grandes contrastes.
En principio íbamos a ir en un crucero, pero dado el poco tiempo que teníamos para estar en Turquía, decidimos cambiarlo por un viaje organizado, si bien nos terminó de decidir el saber que en Estambul estaríamos dos días y medio totalmente libres para elegir nuestras visitas, y muy importante también, nuestras pausas, como la de la foto, que fue el sitio donde más a gusto estuvimos: el café de Pierre Loti, sobre El Cuerno de Oro. No encontrábamos camino para irnos de allí.
Empezamos el viaje en la Capadocia, seguimos por Estambul, Bursa, Pamukkale, Efeso y Esmirna.
Era la primera vez que íbamos en un viaje de este tipo y tenía muchas dudas en cuanto a hoteles, guías, etc, pero TODO ha salido perfecto. Incluso la suerte de ser un grupo de solamente quince personas, lo que ha facilitado mucho los desplazamientos, las entradas a los sitios... en fin... todo estupendo. Y los hoteles han sido estupendos. En Estambul lo teníamos al lado del tranvía, lo que nos facilitó muchísimo el desplazamiento por la ciudad, y los últimos, han sido realmente espectaculares. El guía con una gran formación para explicarnos todo lo que veíamos, y en ningún momento intentó vendernos nada, ni insistió en que hiciéramos con él alguna excursión. Ya digo, que la experiencia ha sido estupenda.
Los turcos nos han parecido una gente muy amable y hospitalaria, y aunque ellos quieran desligarse todo el tiempo de su parecido con los árabes, la verdad es que al ser en un porcentaje muy alto de religión musulmana, todo el tiempo nos lo parecía, y creemos que se diferencian muy poco.
Hemos estado en sitios turísticos inevitables, pero también nos hemos ido a lugares más comunes de los turcos, y hemos procurado hacer lo que ellos hacían y comer de lo que ellos comían.
Naturalmente, he ido, como siempre, a un cementerio, en el que los tulipanes crecían a rabiar. Nos contaron que fue aquí donde empezaron a crecer, y más tarde los trasladaron a Holanda. Verdaderamente están por todos sitios y de todos los colores.
Ahora toca descansar porque ha sido todo muy espectacular, pero muy denso.
Poco a poco iré poniendo en el blog todos los sitios por los que hemos pasado y las anécdotas que nos han sucedido.