Bienvenidos a El mirlo de papel

Soy Varech y ando por la Red desde hace un tiempo, lo cual me produce a veces quebraderos de cabeza aunque la mayoría de las ocasiones me satisface.

5 de julio de 2016

Sídney. Viaje de ida


Por fin llegaba la hora de viajar, tan lejos, que a veces pensé que éramos unos insensatos, pero solo de imaginar las caritas de mis nietos y la alegría de mis hijos, se me quitaban las dudas, y la ilusión podía más que la incertidumbre.
La salida de nuestro vuelo estaba prevista para las diez menos cuarto. Llegamos a la T4, facturamos lo indecible y cogimos un trenecito que nos llevó hasta la T4S.

3 de julio de 2016

Crucero Barcelona-Estocolmo. Estocolmo


Nuestra última escala fue Estocolmo, y aunque ya la conocíamos, no nos importó disfrutarla una vez más, sin entrar a museos, al metro o al Ayuntamiento. Nos sentamos en las terrazas, sin mirar el reloj, puesto que hacíamos noche en el puerto, y comimos tranquilamente.
La vez anterior, el barco atracó frente al parque de atracciones y fue fácil acceder al centro, pero ahora, el puerto estaba muy lejos, y a pesar de que el autobús 76 nos dejaba muy bien, preferimos coger la lanzadera que puso la naviera.

2 de julio de 2016

Crucero Barcelona-Estocolmo. Warnemünde y Rostock




En los cruceros hay escalas de primer orden y otras de segundo, pero sin embargo esta, que la creíamos de relleno, resultó interesante, divertida y cómoda de hacer.
Warnemünde es una ciudad del norte de Alemania, conocida como el balneario de Rostock, situadas ambas a pocos kilómetros, en la desembocadura del río Warnow. 
En la foto se puede ver a la entrada del estuario, la clarísima línea de la playa de Warnemünde, una de las más fotografiadas, por la blancura de su arena y por las cestas para el descanso que están por todas partes.