23 de abril de 2014

Muy feliz día del libro


A veces, las casualidades nos sorprenden y es lo que a mí me ha pasado esta mañana: han tocado a la puerta y un señor me ha traído un paquete que contenía... ¡Mi libro!
Por fin ve la luz en formato papel y me siento muy feliz por ello, aunque el proceso de publicación me haya dado bastantes dolores de cabeza, pero ya está aquí, y espero que esta coincidencia sea un buen augurio, incluso lo creo así.

Es una historia muy agradable de leer (qué va a decir una de su hijo), y que mantiene la atención del lector de principio a fin del libro. Si has estado en Estambul podrás recordar junto con sus protagonistas los lugares que seguro fotografiaste mil veces y las calles por las que te perdiste buscando huir de los lugares más turísticos. Si todavía no la conoces, después de leer la novela sentirás unas tremendas ganas de visitarla, y te será muy fácil moverte por ella, gracias a lo detallado de los recorridos y a la información rigurosa de los lugares a los que Ángela y Tomás, te habrán llevado.
En fin, que aquí os presento mi ópera prima.
Tenía muy claro al principio, a dónde irían los beneficios que se obtuvieran por su venta: a mi amigo Alfredo (sí, ese magnífico chaval al que se le ha negado la entrada al auditorio por su discapacidad); mas, después de recabar información y ver con tristeza que casi tendría que pedir perdón al mundo por haber escrito un libro, veo que mi ayuda no podría ser mucha,  incluso que podría meter a su familia en un lío con Hacienda, por lo que dejaré en espera lo que era para mí una gran ilusión. No obstante, sigo pensando que el beneficio que genere tras los gastos, de una forma u otra, irán para él.
Este libro es el de autor, y cuando lo pongan ya a la venta, dentro de muy poco, ya os diré dónde se puede adquirir.
Que tengáis un feliz día del libro.