18 de mayo de 2013

¿Y los sueños sueños son?


Llevo días preocupada. Ando dándole vueltas a eso tan manido de la reencarnación, pero es que ahora se me ha juntado con un comentario que hizo un amigo en el face, referente a los sueños recurrentes y el significado que ellos podrían tener en en relación a nuestra pasada vida. Por eso ando que no vivo en mí.
Hay sueños que podríamos denominar "clásicos",
como es el de estar andando tranquilamente por el campo y ver un toro derechito a nosotros. A partir de esa imagen, las piernas ya no nos obedecen y nosotros huimos a cámara lenta, mientras que el toro viene a toda leche. Aquí ya  nos solemos despertar de la impresión, y respiramos hondo cuando comprobamos que estamos en la cama.
Otro es el consabida cascada de muelas: una tras otra van a parar a nuestras manos, que no pueden abarcar el torrente mueleril (aquí, el editor me ha puesto la palabra en rojo, pero me da lo mismo). Nos miramos al espejo, que por aquello de las casualidades siempre hay uno delante, e intentamos pegarnos los dientes a las encías con loctite (como este sueño es inmemorial, antes lo harían con los pegamentos de la época), pero si quieres arroz Catalina, lo caído, caído se queda.
¿Quiere eso decir que todos los que hayan soñado con el primero  han llegado a ser toreros, ganaderos, maletillas, apoderados, banderilleros... algo referente al mundo taurino? Por tengo otra duda que hasta ahora nadie me ha despejado: ¿Si la materia no se crea ni se destruye, sino que se transforma, podremos haber sido animales en vidas pasadas? Lo mismo alguno de los que sueña estas cosas ha sido toro o vaca.
¿Y los del segundo fueron en su día dentistas? Según mi amigo, es posible.
Pero a mí lo que me tiene muy mosca es el sueño que me persigue toda mi vida, y que a nadie he oído referir: siempre voy tras una bola más grande que yo, que no puedo abarcar. Me limito a dirigirla hacia donde quiero ir, y así ando y ando, hasta que me despierto. Toda mi vida detrás de la puñetera bola, para nada. Y digo yo... Dios mío qué repelús, porque los odio... ¿Puede que en el pasado haya sido un escarabajo pelotero?
Creo que mejor ni lo pienso.