En homenaje a mi cumpleañera preferida. La del año que viene, será el doble de grande.
Es una tarta hecha con bizcocho genovés, rellena de crema de limón y con una cobertura de nata y queso (el famoso "frosting", ya sabéis, jejejejeej)
Bizcocho genovés:
5 huevos
5 cucharadas de azúcar
5 cucharadas de harina
1 sobre de levadura química
Se baten las claras a punto de nieve, se va agregando el azúcar poco a poco, luego las yemas, y por último la harina con la levadura.
Horno caliente a 180ºC y molde encamisado. Verter y cocer hasta que la aguja salga limpia. Más o menos 15 minutos.
Crema de limón
3 huevos
El zumo de tres limones y la ralladura de uno de ellos
Azúcar al gusto, pero aproximadamente de 150 a 200 grs, dependiendo de si gusta con más sabor a limón o menos.
Una cucharada de mantequilla.
Se pone en un cazo la mantequilla a derretir, se aparta y se echa el zumo, la ralladura, el azúcar y los huevos batidos. Se mueve todo bien y se pone al fuego removiendo sin parar para que no se pegue al fondo. Sale mejor al baño María, pero como siempre voy corriendo, pues lo aligero y también queda estupendo.
Cuando espese se aparta. Yo la suelo hacer el día anterior y la dejo en el frigorífico porque está más firme para echarla luego.
Cobertura, o lo que es lo mismo píjamente, frosting.
300 cc de nata para montar (la de mercadona ya lleva estabilizante)
250 grs. de queso filadelfia
150 gr. de azúcar glass
Se bate el queso con el azúcar y se reserva.
Se monta la nata y se le va añadiendo el queso.
Y nada más. Se decora la tarta a gusto del consumidor.
Aunque la crema de limón se vea naranja en la foto, son misterios insondables de las cámaras, pero juro que era amarilla.
¡Que os aproveche!