30 de noviembre de 2009
Tortas de manteca
Postales de Navidad
22 de noviembre de 2009
Dulce de membrillo
Candelabros de tela
20 de noviembre de 2009
Ángeles fregona
Os explico cómo se hacen:
17 de noviembre de 2009
La Cagonlaleche Cap III
Jacar:
Evidentemente, los versos de esta cancion, tuvieron que ser escritos por alguno de los tres amantes. Como llegaron luego a manos de Joan lo desconozco.
Wrecked:
Veo que al fín confiesas, tabernero taimado.
Yo doy fé de la veracidad de Iñigo y Altair, pues la casualidad me condujo a compartir muelle con la Cagonlaleche en la Isola de Favignana en aquel inicio de otoño inolvidable. Vosotros erais huéspedes invitados en la Villa Florio, que aún domina, con su marchito esplendor, el pequeño puerto atunero.
La signora Lucia había participado con poca fortuna en el Rally Targa Florio, y Don Ignazio la invitó a reponerse de ciertas dislocaciones óseas en su isla. Desde mi mugriento Tramp-steamer os ví muchas veces salir para fondear en Cala Rossa. El mismo lugar donde una legión de obreros medio esclavizados cortaban la piedra que había de ser mi cargamento. Por cierto, ¿qué era aquella bebida rojiza que tomábais con tanto ceremonial a la una en punto del mediodía? ¿Qué misterio rodeó vuestra precipitada marcha? ¿Tuvo que ver con la extraña cólera que Don Ignazio desplegó en los días siguientes?
Rapperrr:
Jeje, parece que Iñigo se ha quedado mudo. Quizá no logra comprender la trascendencia que sus revelaciones iban a provocar en esta mesa de contertulios, de esta taberna de gente de mal de vivir.
A Cagoleta, quizá en otro vida Lucía ...la profunda impresión de sus revelaciones, sobre sus devaneos amorosos con el macizo y corpulento pescador de perlas Jacar, me impiden contestarle en este momento.
Iñigo:
Disculpad mis silencios. Las lágrimas me impiden articular palabra. La súbita aparición del espíritu de Lucía me ha dejado trastornado... Intentaré proseguir con nuevas revelaciones en cuanto esté repuesto. Un saludo
N'Guebo:
Aun no puedo dar crédito a lo que leen mis ojos... Luccía, mi Ama...en boca de Corsarios.
Mi nombre es N'Guebo, hijo de príncipes Nubios, nieto de Reyes. Mi linaje procede de un pueblo orgulloso y rebelde de la célebre región de Numidia-La-Ghana. Fui esclavo de Luccía a bordo de la Cagonlaleche, en las fechas en que acontecieron los hechos que aquí relatáis. Esclavo de sus ojos y de la pureza de su alma. Tanto yo como mi primo Mo'Kele fuimos comprados a nuestros captores por un comerciante Turco en el estrecho del Bósforo. Decidieron hacerme eunuco, y, esto unido a mi condición de rebelde esclavo, provocó el apelativo que me engalana. Yo soy uno de esos "dos negros" que los náufragos furtivos mencionan con tanto desdén.
Embarqué con Luccía y Mo'Kele cuando una tarde, se apiadó de nosotros y nos liberó de nuestra prisión en Estambul. Desde entonces fuimos suyos por decisión, pues le debíamos la vida y el alma. Recuerdo a los sicarios del mercader corriendo tras nosotros con sus dagas desenfundadas en una frenética carrera hacia el puerto. Aun puedo ver el gesto de arrojo y decisión de Luccía, saltando sobre los norays y largando amarras, alejando la nave del muelle y librándonos de una horrible muerte por sólo unos metros.
Navegamos por el Mediterráneo en eternos atardeceres adorando a Luccía, oyéndole recitar versos y refrescándola con abanicos de plumas en la cubierta de popa. Son incontables las puestas de sol en que contemplaba sus labios carnosos y sus ojos negros y profundos, su cabello reflejando los últimos estertores del sol moribundo mientras sonreía complacida con nuestras atenciones y cuidados.
Estuve allí observando cómo recogió a los náufragos que tanto cambiaron nuestras vidas. Supe enseguida que los tres se prendaron de ella y mis ojos escrutaban la noche cual depredador felino en sus idas y venidas por la goleta, en busca de los favores de mi ama. Es cierto que su alma generosa trascendía a la humana comprensión, pero algo hubo entre ellos que superó mis previsiones.
Les legó su libro más amado, el que más disfrutaba en los atardeceres. Les legó su casa, y por fin su Goleta. Mi primo y yo desembarcamos libres en Carloforte, al saber que no veríamos nunca más la sonrisa de Luccía. Espero que se halle con sus antepasados y celebre desde allí este homenaje a su memoria. N'guebo.
Continuará........
Fundación Gala-Dalí
Es el mayor objeto surrealista del mundo, que ocupa un edificio del antiguo Teatro Municipal del siglo XIX, destruido al final de la Guerra Civil, y sobre cuyas ruinas decidió Dalí, crear este museo.
En la Plaza del Museo, un monolito de Wolf Vostell, con catorce televisores y rematado por una cabeza de mujer. Entre este pintor y Dalí había un pacto para intercambiarse obras en sus respectivos museos.
Foto del grupo que fuimos a ver el museo. Guineanos de pro.
Cabeza de cartón de un monstruo, regalo de Rafael Durán, que se apoya sobre un soporte de huevos con pequeñas muñecas en los ojos, y una tele en la frente.
Monumento a Francesc Pujols. Hay un olivo, un cuerpo cubierto con una toga blanca, un huevo dorado hace de cabeza, y un busto romano.
Fachada de la entrada del museo: figuras con panes y un astronauta.Aquí, Antonio jugando con la cámara. El patio es semicircular, rodeado de hornacinas con un maniquí en su interior, los jardines simulando la letra G de Gala, y cuatro grutescos plenos de simbolismos. Se dice que el de la derecha lleno de mariscos y cajones es hombre y el de la izquierda hembra.
El grutesco macho
Aquí estoy al lado del cadillac, con la torre de neumáticos y la cristalera al fondo
Detalle de la barca, de las muletas y de los preservativos.
El paraguas que culmina la instalación vertical y que se abre cuando llueve dentro del coche
La parte derecha del escenario, con el acceso a las distintas salas. En el hueco que hay más pequeño, abajo a la izquierda, se encuentra el cuadro de Bettoven hecho con tinta de calamar.
Éste es el cuadro:
"Autorretrato blando con bacon frito". Se halla en la sala de las pescaderías, que se llama así porque cuando estaba en ruinas, se utilizó como lonja. Y siguen las muleta por todas partes.
Tapiz del dormitorio con sus relojes blandos.