Maravillosamente refrescante, esta tarta es ideal para estos días de calor que estamos padeciendo. Posiblemente la más fácil de realizar, ya que está todo hecho de antemano y no tenemos que hacer otra cosa, que no sea montarla. Si en lugar de azúcar, a la nata le ponemos fructosa, es un postre apto Monty.
Elegiremos una sandía bonita y cortaremos una rodaja de unos cuatro dedos, de la parte central. Le quitamos la corteza, la "pulimos" bien y la dejaremos unas tres horas enrollada en papel de cocina para que suelte el agua exterior. Le cambiamos tres o cuatro veces el papel.
Bueno, pues ya tenemos lo que hará las veces de bizcocho y lo ponemos en una fuente.
Lo cubrimos bien todo con nata, que la podemos montar o comprar ya montada, y la adornaremos de frutas como más nos guste o con las cosas que tengamos por el frigo en ese momento.
Por los bordes se puede poner almendras tostadas o dejarla tal cual está la de la foto.
Al frigorífico y a esperar la sorpresa de los invitados cuando la cortemos.
Os dejo un vídeo de otra que hice con la almendra.