Como este año toda va en mi casa de Navidades infantiles, pues he hecho la corona de la puerta tambien dedicada a ellos: un Bob Esponja al que le he puesto el gorro de Papá Noel.
He hecho con telas que no me servían un cordón y las he sujetado con alambre de ese verde de jardinería, dándole forma de corona. Luego le he ido poniendo por encima una guirnalda verde sujeta de la misma forma, y por último le he pegado unos caramelitos hechos con porespán y papel de seda de colores. A los caramelos les he puesto caritas.
Por último, un Bob Esponja de los varios que hay por mi casa, con el toque navideño.
Cuando vi en los supermercados los ferrero de porespán, se me ocurrió que podría trasladar en cierto modo la idea a la corona.
Está colgado de un alambre fino debidamente camuflado, que a su vez cuelga de la puerta.