Riquísima!!!!!!!!
Es la primera vez que la he hecho, y seguro que no será la última porque está exquisita.
Lo más difícil es encontrar los caramelos con los que está hecha, ya que los de Madrid son los buenos, exactamente los de "La Violeta", una pastelería que está en la Plaza de Canalejas.
Con los que venden en esas tiendas que hay frutos secos, variantes y chuches, no sale igual, porque el sabor no tiene nada que ver.
Ingredientes:
200 grs. de caramelos violetas
1 tarrina de queso filadelfia
500 grs. de nata para montar ( mínimo 35% de grasa)
8 hojas de gelatina
1/2 vaso de leche
150 grs. de agua
1 plancha de bizcocho genovés
Preparación de la tarta:
Preparamos primero el bizcocho genovés, con 3 huevos, 3 cucharadas de azúcar, 3 cucharadas de harina tamizada y 1/2 sobre de levadura química: batimos bien las claras, les añadimos el azúcar poco a poco, luego las yemas, y por último la harina con la levadura, en movimientos envolventes.
Untamos un molde (mejor redondo) de unos 24 centímetros de diámetro, y ahí mismo lo ponemos en horno precalentado a 180 ºC. Si es de aire, mejor. En unos diez minutos estará hecho.
Yo ni siquiera lo bañé, porque al estar tan tierno, no hizo falta.
Bueno, pues ya tenemos la base.
Pulverizar los caramelos, en thermomix o en batidora.
Se ponen a remojo 5 hojas de gelatina.
Montar la nata, y añadirle 150 grs. de caramelos pulverizados.
Calentar la leche y añadirle las 5 hojas de gelatina que teníamos hidratándose. Una vez tibia, añadir el queso y mezclar bien. Echar la nata y unir todo con movimientos envolventes.
Verter sobre el bizcocho que tenemos en el molde, y cuando haya cuajado, la metemos a la nevera.
Preparación de la cobertura:
Se ponen 3 hojas de gelatina en remojo
Se calientan los 150 grs. de agua y se añaden los 50 grs. de caramelos pulverizados que nos quedaban. Se deja hervir un poco.
Se aparta del fuego, se espera un poco y se añade la gelatina hasta disolverla por completo.
Verter con cuidado por encima y al frigorífico.
A la hora de desmoldar, es preferible primero pasar un cuchillo por todo el borde , porque se nos puede romper la gelatina si tiramos del desmontable.
Y nada más..................a disfrutar de ese sabor tan especial.
Es la primera vez que la he hecho, y seguro que no será la última porque está exquisita.
Lo más difícil es encontrar los caramelos con los que está hecha, ya que los de Madrid son los buenos, exactamente los de "La Violeta", una pastelería que está en la Plaza de Canalejas.
Con los que venden en esas tiendas que hay frutos secos, variantes y chuches, no sale igual, porque el sabor no tiene nada que ver.
Ingredientes:
200 grs. de caramelos violetas
1 tarrina de queso filadelfia
500 grs. de nata para montar ( mínimo 35% de grasa)
8 hojas de gelatina
1/2 vaso de leche
150 grs. de agua
1 plancha de bizcocho genovés
Preparación de la tarta:
Preparamos primero el bizcocho genovés, con 3 huevos, 3 cucharadas de azúcar, 3 cucharadas de harina tamizada y 1/2 sobre de levadura química: batimos bien las claras, les añadimos el azúcar poco a poco, luego las yemas, y por último la harina con la levadura, en movimientos envolventes.
Untamos un molde (mejor redondo) de unos 24 centímetros de diámetro, y ahí mismo lo ponemos en horno precalentado a 180 ºC. Si es de aire, mejor. En unos diez minutos estará hecho.
Yo ni siquiera lo bañé, porque al estar tan tierno, no hizo falta.
Bueno, pues ya tenemos la base.
Pulverizar los caramelos, en thermomix o en batidora.
Se ponen a remojo 5 hojas de gelatina.
Montar la nata, y añadirle 150 grs. de caramelos pulverizados.
Calentar la leche y añadirle las 5 hojas de gelatina que teníamos hidratándose. Una vez tibia, añadir el queso y mezclar bien. Echar la nata y unir todo con movimientos envolventes.
Verter sobre el bizcocho que tenemos en el molde, y cuando haya cuajado, la metemos a la nevera.
Preparación de la cobertura:
Se ponen 3 hojas de gelatina en remojo
Se calientan los 150 grs. de agua y se añaden los 50 grs. de caramelos pulverizados que nos quedaban. Se deja hervir un poco.
Se aparta del fuego, se espera un poco y se añade la gelatina hasta disolverla por completo.
Verter con cuidado por encima y al frigorífico.
A la hora de desmoldar, es preferible primero pasar un cuchillo por todo el borde , porque se nos puede romper la gelatina si tiramos del desmontable.
Y nada más..................a disfrutar de ese sabor tan especial.
