21 de noviembre de 2010

Crucero Báltico: Entrada a Estocolmo


En esta escala me ha sido dificilísimo elegir fotos, por lo cual la he dividido en dos: "Entrada a Estocolmo" y "Estocolmo".
Esta ciudad tiene un archipiélago formado por más de 24.000 islas e islotes y el paso del barco entre ellas bien merece el madrugón y el frío que pasamos. Valió la pena.
A las cuatro de la mañana el Práctico subió ya y gobernó el Empress hasta el puerto, donde teníamos prevista la llegada a las nueve de la mañana, como así sucedió.
Pertrechados con nuestras cámaras y bien abrigados nos fuimos a la cubierta superior para ver el espectáculo del amanecer entre las islas, que fue algo fascinante por la luz, el entorno, el silencio, y a veces la sorpresa al ver el barco pasar por sitios inverosímiles.
Islas pequeñísimas estaban habitadas y casi todas las casitas disponían de sus puertos. Yo creo que a las primeras, por estar tan alejadas de tierra, posiblemente no les llegara la luz ni el agua potable. Era como estar en medio de la nada, pero la nada era un belleza de por sí.
Ha sido mucho trabajo de seleccionar fotografías y al final he puesto un montón porque todas me parecían preciosas.
Aquí os las dejo y estoy segura de que disfrutaréis de ellas. Yo no escribiré para no distraer vuestra atención. Subimos a cubierta.


















































Y por fin las gaviotas en el puerto. Muchísimas y muy atrevidas. Un espectáculo.