Ahora que ando cerca de las 20.000 visitas, es hora de hacer balance de mi experiencia bloguera, que no es mucha, pero que ha ocupado bastantes horas de mi vida desde que inicié esta aventura hace aproximadamente año y medio.
Y me doy cuenta de que de esas veinte mil, casi la totalidad son "visitas compresa", o sea, que o se notan, no se sienten y no traspasan.
¡Qué situación tan surrealista!
Tiene su punto eso de no saber a quién se dirige una cuando escribe un post ¿Los serios los encontrarán muy superficiales? ¿Se aburrirán los cachondos con mis rollos de historia? ¿Alguien habrá probado mis recetas? Me muevo de incógnita en incógnita.
Sé que San Google es el patrón de las visitas y que muchos entráis al pajarito de forma casual, pero me haría muy feliz que encontráseis en mi blog algún apartado que fuera de vuestro agrado y que os retuviera unos minutos en las páginas del mirlo.
Por mi parte, me esfuerzo en ofreceros algo digno en lo que perder parte de vuestro tiempo.
Y como ando de balances, agradezco la compañía de algunas personas que sé que están ahí, así como los comentarios que me dejan de vez en cuando. Pocos...........que tampoco vamos a exagerar, jejejeje....... ,pero que siempre son bienvenidos.
