19 de enero de 2010
¿Nos hemos vuelto locos?
Es lo que pienso cuando escucho que nuestra representante en Eurovisión puede ser Karmele Marchante, ya que va en cabeza arrasando, con más de 9.000 votos de ventaja a los segundos en lid y que se llaman "Los pezones rojos".
Si hay cachondeo, la primera que se presenta soy yo, pero me temo que es otra oportunidad para hacer el ridículo en Europa y en el mundo entero, como lo hicimos con el Chiquilicuatre.
¿Quién decide el artista a enviar? ¿Una legión de majaderos que lo único que buscan es divertirse y que piensan que cuanto peor mejor?
¿No tenemos en España gente profesional que pueda hacerlo y no dejar que lo hagan los que no deben, o mejor dicho, los que buscan que hagamos el ridículo más espantoso?
A mí no me gusta ese festival, pero no por ello tengo que faltar al respeto a la gente que se lo curra y se presenta en condiciones. Todos sabemos que siempre ganan los mismos, pero si algo no conviene, pues se deja y asunto arreglado.
El año pasado se presentó una chica que no lo hizo mal, pero que tuvo que cargar con el peso de nuestra burla al festival el año anterior, y naturalmente le pasaron factura.
España ya hace el ridículo más que sufientemente en muchos órdenes, como para encima que nos echemos también ésto a la espalda. Y repito, que si no nos gusta a los españoles, o nos sentimos discriminados, pues nos retiramos y listo.