Bienvenidos a El mirlo de papel

Soy Varech y ando por la Red desde hace un tiempo, lo cual me produce a veces quebraderos de cabeza aunque la mayoría de las ocasiones me satisface.

29 de enero de 2010

Crear un slide


Es una sucesión de imágenes que pasan de diferentes formas, según elijamos.
Yo acabo de hacer uno con los platos dulces que tengo en el blog.
Hay una dirección que es www.slide.com/arrange , y una vez allí tenemos que registrarnos, con lo cual todos los que hagamos, nos los guarda.
Lo primero que hay que hacer es tener bien claro y localizadas, las fotos que queremos subir, y una vez que tenemos ésto hecho, empezamos.
Tenemos una ventanita y al lado pone "buscar" (enmarcada en rojo en la foto). Pinchamos aquí y nos aparecerá nuestro archivo. Escribimos el que queremos poner y lo sube. Y así sucesivamente.
Abajo de la página se irán viendo las imágenes, que podemos suprimir si queremos pinchando el aspa del ángulo superior derecho (puede que sin darnos cuenta repitamos alguna), a las que podemos poner el nombre, o arrastrar para ponerla en otro lugar.
Cuando ya las tenemos subidas, aparecerá arriba por defecto el "modelo" de collage, pero podemos ir pinchando en los otros para ver el efecto que nos gusta más.
Una vez que hemos elegido, le damos a "guardar" para obtener el código que tenemos que poner en el blog. Seguramente saldrán unas opciones para ponerlas en distintos sitios, pero tenemos que elegir "blog".
Copiamos el código, y nos lo llevamos a "diseño", y lo ponemos dentro de uno de los rectángulos de "HTML-javascript", en el orden que queramos que aparezca. El tamaño es grande, pero lo ajustamos a la barra. El mío tiene 250 por 200. Es conveniente dejar un par de espacios por si queremos borrarlo, saber dónde empieza y dónde acaba.
En caso de que quisiéramos después añadir o eliminar una imagen, o poner bien un nombre que se nos ha escapado mal, nos vamos a la dirección y cuando salga, pinchamos arriba en "My slide". Saldrá lo que tenemos metido, y a la derecha pone "opciones". Pinchamos y se nos despliega una serie de ellas, entre las que se encuentra "editar". Lo hacemos, lo guardamos otra vez, pero ya no tenemos que volver a pegar el código.
Y ya está.

Poner una foto en la barra


Si queremos poner una foto en la barra lateral de nuestro blog, lo tenemos que hacer, al igual que el video, en código html y meterlo en uno de los recuadros de "HTML-javascript" que tenemos en "diseño".
Yo tengo las imágenes en http://www.tinypic.com/, y cuando busco cualquiera de ellas, me salen distintos códigos para direcciones, según el sitio donde la vaya a poner.
Cuando sale la primera pantalla le damos a "examinar", la elegimos, pinchamos y la abrimos. Podemos entonces variar el tamaño de la foto, porque hay algunas que tardan muchísimo en poderse subir.
Le damos a "cargar ahora", y nos saldrá la pantalla de la foto. Elegimos la que he subrayado, copiamos el código, nos vamos al recuadro de "HTML-javascript", y la pegamos allí.
Todo lo que tengamos en la barra lo podemos poner en el orden que queramos.
Yo aconsejaría dejar un par de espacios entre una cosa y otra, por si alguna vez queremos borrar algo, que nos sea más fácil saber dónde empieza y acaba el código.
Y si no queréis liaros y no tenéis muchas cosas, un rectángulo para cada una. Así hay menos peligro de meter la pata borrando algo que no queríamos.
También la podéis poner con la opción "añadir un gadget", pinchar el de "imagen" y seguir los pasos que van saliendo en la ventana.

Poner un video en la barra

Cuando queráis incluir un video en la barra lateral del blog, copiad la dirección que pone al lado, pero no la URL, sino la que he puesto en rojo, que es en código html.
Os váis a "diseño", y os saldrá una pantalla con un rectángulo a la derecha que pone "añadir gadgets". Pincháis ahí y de los muchos que aparecerán, habrá uno que ponga "HTML-javascript".
Lo pincháis y pegáis ahí el código que habéis copiado. Podéis variar el tamaño para que se ajuste al ancho de vuestra barra. Los que yo tengo son de 250 por 175.
Muy importante, hay que darle a "guardar".
Luego, con el ratón ponéis este rectángulo en el orden que queráis.



Hacer un backup


Para protegernos de meteduras de pata, y perder todo el trabajo que le hemos dedicado al blog, hay una forma de guardarlo y poderlo recuperar después.
Conviene hacerlo de cuando en cuando.
Nos vamos a "configuración", y una vez allí, en "herramientas de blog", pinchamos la opción "Exportar blog".
Nos saldrá una ventana, y pinchamos "descargar"
Se descargará enseguida, y luego lo guardamos donde queramos.

Leer más.....con imagen en miniatura

A veces, como es mi caso, escribimos textos bastante largos, y resultaría muy monótono a la vista verlos íntegros en la portada, por lo cual, es interesante poner la coletilla "Leer más".

Con ello conseguimos que sólo aparezca parte del texto, acompañado de una foto en miniatura que acompañe al mismo. Por defecto saldrá siempre la que tengamos en primer lugar.

El resultado es el que yo tengo en el blog.

Os dejo una dirección en la que viene muy claro cómo hacerlo, y la advertencia principal, es que antes de tocar la plantilla, la guardéis como oro en paño.

http://tuscodigosweb.blogspot.com/2009/02/leer-mas-con-imagen-miniatura-que-le.html

27 de enero de 2010

Marca de agua

Las marcas de agua se ponen en imágenes propias, para evitar que alguien pueda apropiarse de la autoría de esa foto. Sobre todo en manualidades y en cocina, se suelen ver bastante.

Abrimos la foto con Paint y pinchamos en la "A" que sale en el recuadro de herramientas de la izquierda. Luego, pincharemos en el segundo recuadro que sale al final de esta barra, y ya nos vamos a la foto y abrimos el rectángulo.

Elegimos color y en la barra de herramientas de texto, el tipo de letra y tamaño.

Si la barra de estado no está visible, pinchamos en "ver" para que salga. Y si la tuviéramos desactivada, hacer lo siguiente: al principio del cuadro de herramientas de la izquierda hay una estrella, y luego un rectángulo. Pinchar en él, y luego hacerlo ya todo igual (Pinchar en "A", en el segundo recuadro, y abrir el rectángulo en el sitio de la foto que queramos).
Como ya tendremos la barra de herramientas de texto, elegimos.

Escribimos nuestro nombre o el de nuestro blog, pinchamos en la foto para que se vaya el rectángulo y le damos en archivo a "guardar como".




26 de enero de 2010

Captura de pantalla de un video


Me trajo de cabeza durante una temporada, el poder hacer una captura de pantalla, de un video.

A veces nos pasa que hacemos una foto, y sin darnos cuenta el dedo se nos ha ido y tenemos la cámara en "video", con lo cual, no podemos pasar al ordenador la imagen, ni por supuesto editarla.

La solución que me daban era bajarme unos programas, que estaban muy lejos de lo básico de informática que yo necesitaba, y por fin un amigo me dijo algo sencillísimo de hacer:

Se coloca el puntero del ratón en cualquier sitio vacío del escritorio, y pinchamos con el botón derecho.

De la ventanita que sale, pinchamos "propiedades". De lo que nos vuelva a salir, "configuración", y de lo que vuelva otra vez a salir, "opciones avanzadas".

Entonces nos aparecerá otra ventana y pincharemos en "solucionador de problemas", y en la que nos salga, movemos el indicador de Aceleración de hardware hasta la posición "mínima". (Hay una escala que está al máximo, pues nosotros la traemos al otro extremo). Aceptamos y nos salimos.

Ahora nos vamos al video y con la tecla "ImrPt", pulsamos justo en la imagen que queramos capturar, y se procede ya igual que en la captura de pantalla normal.

Cuando se haya terminado, se vuelve a pinchar en un sitio vacío del escritorio y se hace la misma operación, sólo que cuando lleguemos al "solucionador de problemas", volveremos a poner el Acelerador de hardware al máximo.

Es mucho más sencillo de lo que parece.

Capturar una pantalla fija


No soy ni mucho menos entendida en informática, que ya me gustaría a mí, pero para hacer el blog y sacarlo adelante, me he encontrado a veces con dificultades, que luego resulta que eran facilísimas de solucionar, y no me parece mala idea compartirlas.


Una de ellas ha sido capturar una pantalla.

Cuando la tengamos, pulsamos la tecla "ImrPt", que suele estar arriba de la de "insert".

Nos vamos al ángulo izquierdo inferior y pinchamos en "inicio".

Si tenemos el "paint" lo pinchamos, y nos saldrá otra pantalla. Le damos en edición a "pegar" y ya tenemos en la pantalla lo que queríamos capturar.

Pinchamos en archivo y le damos a "guardar como".

Si sólo nos interesa la imagen, la editaremos y recortaremos lo que queramos.
He puesto el "paint" porque es el que yo tengo, pero lo podéis hacer con cualquier otro.


22 de enero de 2010

Bombones de jamón


Otra receta estrella en algunos foros, de la que ya no recuerdo quién fue la autora.
Ingredientes:
Jamón serrano, blandito
Una tarrina de queso de finas hierbas
Unos veinte dátiles
Aceite para pincelar
Cubiteras de goma, redondas
Preparación:
Se pincelan los huecos de las cubiteras y se pone jamón, que sobresalga de los bordes, para poder cerrar bien luego.
Se trituran 12 dátiles y se juntan con el queso. Los otros, se parten por la mitad (lógicamente estoy hablando de dátiles sin hueso.....jejejej......)
Dentro del jamón que tenemos en las cubiteras se pone un montoncito de la mezcla de queso y dátiles, y medio pinchadito en el centro. Se cierra todo con el jamón.
Así se van rellenando todos los huecos.
Se pueden congelar, sacándolos unas dos horas antes de consumirlos.

21 de enero de 2010

Tarta de arroz con leche


Sacada del blog de Auro y riquíííííííííí...........sima................

Ingredientes:200 gr. de azúcar.
80 gr. de arroz.
3 huevos.
800 gr. de leche.1
canela.
Corteza de limón.
3 hojas de gelatina.
Caramelo líquido.
Instrucciones:
Hidratar las hojas de gelatina
Pulverizar el azúcar en velocidad 5-10 unos 15-20 segundos.
Añadir el arroz y pulverizarlo 2 minutos en velocidad 5-10.
Añadir la corteza de limón rallada.
Añadir la leche, los huevos y un poco de canela molida.
Programa 17 minutos, temperatura 100º, vel. 2.
Añadir la gelatina antes de terminar.
Poner la mezcla en un molde caramelizado y dejar enfriar.
A la nevera, y mejor de un día para otro.
Volcar y adornar con nata o con almendra.

20 de enero de 2010

La Cagonlaleche Cap VII


N´Guebo:
Como os relataba, subimos muchos a la gran canoa, escoltados por los hombres de largas túnicas y turbantes. El sol salía por detrás de la tierra seca del desierto y en la orilla del Gran Azul, un griterío de hombres con túnica nos ensordecía, mientras se cargaban sin cesar muchos fardos en la canoa. Ésta era inmensa, ni Mo'Kele ni yo mismo habíamos visto nunca una tan grande. Tenía dos troncos altos de los que pendían unas ramas a las que iban atadas mantas blancas, y muchas cuerdas sujetaban los troncos sobre la canoa. Sentados sobre el suelo de madera, todos los hombres de la selva juntos, mirábamos sorprendidos todo aquello tan nuevo para nosotros. El sol ya brillaba alto en el cielo y arrancaba al Gran Azul destellos de luz amarilla. Poco después, cinco o seis hombres con túnica se aproximaron a nosotros, encendieron un fuego en una vasija de metal y nos pusieron en las muñecas unas pulseras pesadas y negras que no podíamos quitarnos, luego ataron con cuerdas de hierro unas pulseras a otras y pronto todo el grupo de hombres de la selva estuvo atado. Mi afinado instinto me dijo que algo iba mal. Mo'Kele estaba también muy preocupado. Por una puerta nos hicieron bajar a todos al interior de la canoa. Era oscuro y húmedo. La madera resbalaba y había ratas. Los hombres de las túnicas ataron las cuerdas de hierro a las paredes de la canoa y quedamos allí todos los hombres de la selva. Cautivos. La canoa se movió. Se balanceaba lentamente y supe que partíamos para no volver más a nuestro poblado en mucho tiempo. No veía el sol, no sabíamos donde nos llevaban, le dije a Mo'Kele; "primo, quizá no volvamos a ver a nuestras gentes en mucho tiempo, pero tenemos que averiguar a dónde nos llevan para, un día, saber volver.". Miré su rostro y ví su mirada perdida y su tez mortecina, yo tambíén empecé a sentir como mi cabeza daba vueltas y mi estómago se revolvía. Nuestros cuerpos no tenían fuerza y al cabo de un tiempo volvieron los hombres de la túnica para hacernos subir al exterior de la canoa. Nos llevaron a una esquina y allí nos mojaron con agua que penetró en las heridas de nuestra piel y todos gritamos de dolor. Era un agua que no podía beberse, pues tenía un sabor extraño y desagradable. Nos hicieron sentarnos al sol y cuando miramos hacia arriba vimos con estupor las grandes mantas blancas desplegadas que el viento empujaba y que estaban atadas a los troncos y a la canoa con muchas cuerdas que las mantenían firmes. Ese viento movía la canoa con fuerza sobre el Azul. Asombroso.

Miré a tierra y vi a lo lejos el poblado de los hombres de las túnicas, al otro lado sólo el enorme Azul, creo que nos dirigíamos hacia el norte. Relaté este viaje a la señorita Gina, una noche mientras contemplaba la luz de las estrellas en la "Cagonlaleche", ella me miraba complacida con los ojos entreabiertos mientras bebía de su copa (nosotros tenemos prohibido beber la fermentación de la uva, muy popular entre el hombre blanco).

Mo'Kele contemplaba a Gina sin parpadear, yo sabía muy bien qué estaba pensando, y se lo dije mil veces..."Gina no es una Ghanga!".

Mecidos por la suave brisa y surcando los destellos plateados de la Mar en la noche, pasábamos horas hablándole a Gina de nuestra increíble historia, que continuaré más adelante y en la que explicaré cómo aprendí la lengua del hombre de la túnica, cómo fui enseñado a navegar y a encontrar caminos sobre el agua, y cómo llegamos a un extraño país donde fuimos tratados como animales hasta ser salvados por nuestra ama Luccía.

Cagoleta:
Qué lejano suena en el tiempo tu relato, mi querido N'Guebo, y sin embargo aún continúa dañando mi corazón el recuerdo de vuestro sufrimiento en aquel barco que os condujo a la llamada civilización, aunque en este caso no mereciera tal nombre.
Silvano decidió contratar otras dos personas para tripulación de la Cagonlaleche, y conocedora de su buen ojo para estos menesteres, le di toda mi confianza y mi apoyo cuando me habló de unos esclavos que habían sido traídos de África, en penosas circunstancias.
Al hablar con ellos, supo de sus conocimientos en materia de navegación, y pensó que podrían encargarse de la seguridad de la goleta, ya que eran altos y musculosos.
Vinieron y clavaron en mí sus enormes ojos, más grandes y saltones por lo escueto de sus carnes, esperando ser tratados y alimentados como personas. Desde hacía meses vivían en una constante incertidumbre sobre su futuro, sin otro objetivo cada día que ver ponerse el sol que habían visto salir en la mañana.
Y no me importó que en las reyertas habidas por conseguir comida, alguien le cortara un huevo, porque aparte de que ya no le dolía, el que le quedaba era lo bastante gordo para que no se sintiera disminuído.
Así fue como contraté a N'Guebo y Mo'kele como fieles guardianes de la Cagonlaleche.
Y comieron como si nunca antes lo hubieran hecho, y se pusieron macizos, y fueron la envidia de las damas en los puertos donde atracábamos.
Cuando yo no estaba a bordo, me sentía tranquila porque sabía que a Gina no podría pasarle nada malo estando ellos a su lado. Le habrían cortado el cuello a cualquiera que hubiera osado tocarle con la punta de los dedos.
Qué gran acierto el de Silvano al contratarles.

Isi el Marino:
Ante todo, saludaros y agradeceros los buenos ratos que paso leyendo las aventuras y desventuras de la Capitana Luccía y su tripulación, a bordo de su bien amada Goleta "Cagonlaleche", en la cual, algún día no muy lejano, espero prestar mis sevicios. Quiero sepais que estos no son en modo alguno desinteresados.
He leido el perfil de Ginetta, y creo que corresponde a la mujer que tanto tiempo llevo buscando a traves de los 7 mares, y a la que a bien ella me aceptase, entregaria junto con mi amor, lo mejor de mí mismo.
Sé que el camino será arduo, ya que tendré que vencer no sólo su innata timidez, sino el desconocimiento de toda relación con varon. Pero también espero poder lograrlo, gracias a la fe y la ternura que sólo su pensamiento me inspira, confiando llegue ese día en que podamos compartir Vida y Aventuras.
Sobre mi os diré que he pasado en la Mar mil y un avatares, y sufrido varios naufragios, de los cuales os hablaré a menudo a lo largo de nuestras conversaciones. Más que de los salvamentos. El por qué es porque éstos me parecen muchas veces estúpidos, pero...como creo vosotros querréis que os lo cuente... Si os fijais bien, todos son iguales: llevas dias, meses, en tu isla desierta, matando la monotonia del lento transcurrir del tiempo en soledad, bullendo en tu cabeza la idea de cómo salir de nuevo a buscar otro navío donde poder realizar tus sueños. Un amanecer divisas blancas velas en el horizonte. Tomas todas las medidas a tu alcance para atraer su atención. Has puesto piedras sobre una montaña pelada dibujando el SOS, colocado los girones de tu camisa en la punta de un largo palo, encendido una hoguera... En fin,t odas las bobadas que sólo a un naúfrago se le suelen ocurrir...Lo has hecho para quedarte tranquilo, ya que en realidad casi siempre te rescatan por pura casualidad. El barco ha seguido otra ruta por despiste del timonel, la curiosidad de un Capitán ocioso al otear un islote que no aparece en sus cartas naúticas, una recalada por averia..... Pues bien, el barco fondea, un bote que se arria, remos golpeando acompasadamente las tranquilas aguas, marineros a los que abrazas al saltar a tierra..te recogen, te llevan a bordo, te ofrecen cafe, y tal vez ron...Te preguntan quién eres, les cuentas tu historia, En fin..,siempre más o menos lo mismo.
Por eso os digo que prefiero contar los naufragios. Y de ellos,mis momentos favoritos son el trayecto a nado y la llegada a tierra. Que caes al agua, que te agarras a un madero flotando, que te orientas, que hueles tierra, que llegas a la playa, que te tumbas en la arena a reponer fuerzas, que qué hallarás,...en fin, te haces miles de conjeturas que agilizan tu mente con la aventura de lo desconocido.
He naufragado dos veces en la misma isla, pero las situaciones eran totalmente distintas: una con temporal y la otra con calma chicha. Cambiaron los tiempos hasta llegar nadando a la costa, lo desconocido y lo reconocido.....
En cambio, los dos salvamentos fueron prácticamente iguales.....

Gina:
Mochas grecias per desear conocermi e ya veo per il suo post que es personaji culto e amador de la mare, como io. Io sono con forme en tablear amistad con tigo (mejor totearnos ¿no?) e sólo falta sabere ánde nos podemos trovar. Sono doña de un velero Bavaria de 40 píeses que me regaló Luccía e ya tengo experancia a navegare i lo ago bastate bene; si tú queres podemos cita con cestar allí a Livorno. Si avas venir, pon ¿post?. Saluti

Cagoleta:
¿Quién era el enmascarado que ciñó mi cintura en la sombra del salón de baile? Esos negros ojos.....esos ojos...... Tengo que recordar dónde los vi, quitar uno a uno los velos que cubren mi mente, hasta que aparezca el dueño de esos dos centelleantes faros, que a buen seguro me habrán guiado alguna noche en la oscuridad del mar.
Poco a poco los recuerdos van apareciendo y una cascada de imágenes del pasado se precipita en mi presente, pero debo ordenarlas, deleitarme con ellas, volver a vivirlas.
Fue hace quince años; Estábamos rodeando las costas de Madagascar; de pronto el barco se averió y mientras esperábamos para poder repararlo, nos acercamos en la zodiac hasta la isla y desembarcamos en una playa desierta. Recorrimos varios kilómetros sin encontrar rastro humano y de pronto algo llamó nuestra atencion: sentado en un trono hecho de madera, palma trenzada, rafia y cuerdas, se encontraba , rodeado de bellas mujeres vestidas solo con pétalos de flores, un apuesto varón con un pañuelo pirata ciñendo sus sienesy que daba a su rostro un cierto atractivo entre misterioso y aventurero. Eso, y un collar de caracolas, era toda su vestimenta. ¡Dios mio! No se me olvidara nunca esa visión.
Uno de mis hombres hablaba el hova y le explicó nuestra situación, rogándole nos acogiera en su poblado hasta que nuesta goleta estuviese lista, y él muy amablemente y como gesto de amistad me apretó fuertemente contra su cuerpo. ¡¡Ahhhhhhhhh!!!! ,¡Uhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!(pensé para mis adentros). Le explicó a mi marinero que era un príncipe perteneciente a la etnia merina y tenía como misión fecundar a las muchachas del poblado para perpetuar los genes de sus antepasados, y como esa circunstancia se producía a menudo, optó por estar siempre preparado para llevar a cabo tan importante misión. Este príncipe se llamaba VICAVIHE, que quiere decir en su idioma:" Hombre fuerte y mañoso, con cabeza dura pero buena gente, que es capaz de hacer posible lo imposible y que como diga que mete la cabeza por un sitio , por cojones la mete." Parece mentira la capacidad de síntesis que puede tener el malgache. ¿Que no había viviendas? Pues él construía chozas adosadas. ¿Que no había agua? Señores qué problema: la traía del mar a través de un entramado de tuberías hechas de caña de bambú y para más recochineo, con grifos de agua caliente, fria y templada. ¿Que no había cubiertos? Pues con huesos era capaz de construir una cubertería completa, hasta con palas para el pescado, muy útiles en aquella zona. ¿Que no había platos donde comer? Ahí estaba él cogiendo caracolas, cortándolas en rodajas y haciendo una vajilla de 12 platos llanos, 12 hondos y 12 de postre, que por cierto me la regaló más adelante y que forma parte del ajuar de la Cagonlaleche.
Nunca conocí a nadie con tal capacidad de hacer de todo a partir de nada, y me dió pena verle tan desaprovechado. Le dije que por qué no empleaba su tiempo en cosas más divertidas que en fecundar malgachitas y me miró con cara de alucine, ya que no entendía que en el mundo pudiese haber nada mejor, y entonces le hablé del mar, de su embrujo , de su misterio, de su imprevisible respuesta hacia el hombre, del reto de poder enfrentarlo, y algo empezó a despertarse en él.
Estuvimos en la isla durante dos meses y yo le preparé para sacarse el titulin y el PBN; por correspondencia logró aprobar y le facilité entonces los libros para que siguiera estudiando. Como era muy tenaz, se sacó el PER y el PY, pero tengo entendido que con el tiempo llegó a CAPITÁN y anda por ahí disfrutando de su nueva afición.
En otra ocasión os contaré qué pasó con VICAVIHE (mi príncipe), después de nuestro azaroso encuentro en el baile.


Vicavihe:

LUCCÍA ,¡Oh mi tierna LUCCÍA! No creo que ni por un sólo instante pensaras que esos momentos pudieran borrarse de mi mente; qué va. Es imposible totalmente que ni barcos, ni carruajes, ni mansiones, ni palacios, puedan compararse al resplandor de tus cabellos jugueteando con el viento en los momentos en que tiernamente............ -¡¡¡¡JAMÁSSSS!!!!!... Me niego.

-El sentimiento me acompaña por todas las sendas, no sólo por no poder estar contigo sino por no disponer de tiempo suficiente para mantener las velas encendidas sobre mi escritorio. Quizás pienses que es de locos, pero la oscuridad me acompaña siempre y mis manos pierden el poder de la pluma.

-Recuerda que no sólo es fiel el que escribe, sino también el recuerda y sueña.

-Despido mis notas pues son sólo eso: notas. El corazón y el viento siempre se mantienen fuertes al olvido y al anhelo. -Tu fiel servidor: Vicavihe...

Cagoleta:

Habría reconocido esos ojos entre miles.

Me sujetó fuertemente ciñéndome por la cintura............_"¡Sígueme!",_ me dijo_.

Y claro que le seguí, porque conociéndole sabía que era inútil resistirse a sus planes. Mientras corríamos por los jardines, en los rincones oscuros aprovechábamos para darnos algún achuchón furtivo.

Me dijo que había venido exclusivamete a verme, desde Madagascar, y eso me llenó de gozo, porque a las mujeres en el fondo nos halaga que los hombres hagan locuras por nosotras.Ahora viene lo mejor, porque había venido en barco ¡¡¡Pero por carretera, atravesando Africa!!! .Luego embarcó en el Mediterráneo y al llegar a Livorno, otra vez por carretera hasta Florencia.

Salimos a la calle y me lo mostró: era su barco, el barco que él mismo había construído.....pero sobre un remolque tirado por un todo terreno con chofer.Tenía tantas ganas de que yo le diera mi parecer, que le faltó paciencia para hacer toda la travesía por mar como hubiese sido lo lógico.

En el casco ponía VICAVIHE y era un Yawl con 180 metros cuadrados de velamen y más de 14 de largo. Tenía dos mástiles y una botavara de pino de Oregón, casco en caoba de Honduras de 42 mm , y cuadernas de encina y acacia. La cubierta era de teca de Burma y los interiores de caoba. La proa, más corta que la popa era muy esbelta y el timón, de barra, continuaba el perfil del casco. La cubierta resultaba muy limpia y despejada con lumbreras y manguetones de ventilación "tipo Dorade". Aquí colocó vidrios en forma de prisma para la iluminación de interiores. Según él: "El barco era un gran caballo de carreras".

Se le notaba ilusionado y no era para menos, ya que había conseguido su sueño. Me invitó a subir , dió orden al conductor de arrancar el todo terreno y aquello "zarpó".

No daba crédito a lo que veían mis ojos: ¡¡¡¡¡Navegando por la carretera!!!!!

Aprovechando que la noche era bonancible tomanos en cubierta una cena ligera y brindamos por nuestro encuentro. Tuve que proteger mis cabellos con un foulard de Hermés, que casualmente llevaba metido en el canalillo, porque debido a la velocidad que el conductor llevaba me despeinaba mucho, y las curvas, a toda velocidad, eran mucho peor que las escoras.

Los coches con los que nos cruzábamos se quedaban atónitos mirándonos, e incluso nos paró la Policía y estuvo examinando el barco. Nos pusieron un multazo (qué poco románticos), y nos sugirieron que atracáramos la nave en un descampado próximo. Es cierto que íbamos un tanto aparatosos con todas las velas desplegadas, pero como toda locura, tentadora y transgresora. Nos importaba un pito la multa, el guardia, y todo lo que no excediera de su ámbito y del mío. Cómo nos reíamos acordándonos de la cara del policía cuando al entrar al camarote, encontró los preparativos de una noche dedicada plenamente al disfrute: las velas, los pañuelos, las flores, las luces, los aromas, la música y un piscolabis de lo más afrodisíaco sobre una bandeja de caracola.

Por fin todo se arregló y nos dispusimos a terminar la celebración, pero allí sobraba alguien: el conductor. Le despedimos hasta el día siguiente, y con el barco sobre el remolque dimos rienda suelta entre risas y besos y caricias, a la pasión que amenazaba con explotar.

Vicavíhe trajo una grabación del ruido de las olas, y en la oscuridad, con la brisa moviendo las velas, nos parecía estar en medio del mar.

Continuará........

Paté de cebolla

Pues es un paté riquísimo para untar con picos o con un buen pan.
Se puede hacer en thermomix o a mano.
Para thermomix:
500 grms de nata para montar (30% materia grasa)
Un sobre de sopa de cebolla Knorr
Algo menos de un yogurt, natural

Preparación:
Poner la mariposa y echar el sobre de sopa y la nata. Sin cubilete. Velocidad 3 1/2, hasta que cambie de ruido y se vea que ha montado (unos veinte segundos, más o menos)
Abrir y añadir el yogurt. Poner unos segundos más y sacar.
De un día para otro está mejor.
Yo aconsejo echarle un sobre de estabilizante de nata, para que salga más sólido.
Y un detalle muy importante: si tenéis la 31, poned el giro a la izquierda, y saldrá con los trocitos crujientes y riquísimos.

Sin thermomix:
Con las varillas de montar claras, montar la nata con el sobre de sopa de cebolla.
Cuando lo veamos ya montado, añadir el yogurt, darle un poquito más y ya está.
Lo del estabilizante, lo aconsejo igual que con el anterior.

19 de enero de 2010

Mousse de turrón




Esta tarta es el broche ideal de una comida o cena navideña, que le copié a Cane. (Soy una fan suya)
Aunque la haya hecho en la thermomix, se puede también elaborar a mano.

Ingredientes:
Una tableta de turrón de Jijona
2 bricks de nata para montar (30% materia grasa)
2 huevos
50 gramos de azúcar
1 plancha de bizcocho flojo
100 gramos de leche
6 hojas de gelatina
almíbar para calar un poco el bizcocho.

Preparación:
Desmenuzar el turrón a mano y reservar.
Montar las claras de los huevos y reservar.
En el vaso y sin lavar, montar la nata y reservar.
Poner a hidratar la gelatina.
En el vaso, poner las dos yemas, el azúcar y la leche. 5 minutos, velocidad 3, a 90ºC
Añadir el turrón desmenuzado y mezclar unos segundos.
Echar la gelatina escurrida y mezclar.
Tiene que quedar como una papilla líquida.
Dejar templar un poco.
Mientras, poner el bizcocho en el molde desmontable, o en un aro y bañar un poco con almíbar.
Añadir la mezcla del turrón a la nata y las claras con movimientos envolventes para que no se nos baje.
Volcar la mousse en el molde. Poner en el frigorífico, mejor de un día para otro.
Aguanta muy requetebién la congelación.
Para adornarla, hay que esperar a que esté un poco cuajada.
Es mucho más difícil de explicar que de hacer.

Para hacerla sin thermomix, el único punto diferente es que la leche, el azúcar y las yemas, se tienen que poner en un cazo cinco minutos y allí agregar el turrón y la gelatina.
Lo demás es igual.

¿Nos hemos vuelto locos?


Es lo que pienso cuando escucho que nuestra representante en Eurovisión puede ser Karmele Marchante, ya que va en cabeza arrasando, con más de 9.000 votos de ventaja a los segundos en lid y que se llaman "Los pezones rojos".
Si hay cachondeo, la primera que se presenta soy yo, pero me temo que es otra oportunidad para hacer el ridículo en Europa y en el mundo entero, como lo hicimos con el Chiquilicuatre.
¿Quién decide el artista a enviar? ¿Una legión de majaderos que lo único que buscan es divertirse y que piensan que cuanto peor mejor?
¿No tenemos en España gente profesional que pueda hacerlo y no dejar que lo hagan los que no deben, o mejor dicho, los que buscan que hagamos el ridículo más espantoso?
A mí no me gusta ese festival, pero no por ello tengo que faltar al respeto a la gente que se lo curra y se presenta en condiciones. Todos sabemos que siempre ganan los mismos, pero si algo no conviene, pues se deja y asunto arreglado.
El año pasado se presentó una chica que no lo hizo mal, pero que tuvo que cargar con el peso de nuestra burla al festival el año anterior, y naturalmente le pasaron factura.
España ya hace el ridículo más que sufientemente en muchos órdenes, como para encima que nos echemos también ésto a la espalda. Y repito, que si no nos gusta a los españoles, o nos sentimos discriminados, pues nos retiramos y listo.

17 de enero de 2010

La Cagonlaleche Cap VI


Iñigo:
Queridos amigos: cuando Lucía nos abandonó, guardé en un antiguo baúl, que aun conservo en un lugar apartado del desván, todos aquellos objetos que pudieran ofrecerme el más mínimo recuerdo de ella; de forma estúpida pensaba que escondiendo mis recuerdos, conseguía que los mismos se alejaran de mi mente.
Hace un par de días, me atreví a acercarme de nuevo a él y, despacio, con manos temblorosas, di la vuelta a su llave hasta abrir la cerradura. Levanté su tapa y, con lágrimas desconsoladas, fui sacando uno a uno todos los objetos allí guardados. De pronto, al abrir un libro de poemas, no me preguntéis su autor pues fui incapaz de leer un párrafo del mismo, apareció una carta escrita por sus manos en una de nuestras breves separaciones.
Le divertía mucho escribir cartas de amor cuando, por cualquier motivo, teníamos que separarnos. Ella nunca las enviaba, pero me decía que, mientras escribía, se sentía más cercana a mi persona. La dejo aquí transcrita para que podáis comprobar la pureza de su amor:
“Amado Iñigo: Hace tan sólo tres días que partiste en busca de nuevas aventuras y ya mi corazón se desangra de tristeza por tan larga separación. Paso las horas junto a la ventana, oteando el horizonte, como Ovidio hacía con su amada Corina, recitando: “yo seré el primero en distinguir y reconocer tu nave desde la playa, y diré: <>. Te llevaré sobre mis hombros y te daré besos múltiples sin cuento...”.
Mientras, rezo a Eolo para que, como a Ulises, te haya hecho entrega del odre de los vientos, de forma que evite se desaten violentas tempestades que, ya me hagan temer por tu regreso o, simplemente, produzcan un retraso en la hora del reencuentro con mi amado. También le pido que deje escapar al templado Noto para que, dulcemente, te recoja entre sus brazos mientras, con presteza, te empuje hacia mi lado nuevamente.
A Poseidón le pido que te acompañe junto a sus cabalgaduras, en forma de delfines, que te sirvan de guía en la inmensidad del océano, mientras levanta suaves olas que mezan tu goleta, cual si de cuna se tratara, que te lleven a un sueño largo y profundo, donde, de nuevo, tu y yo nos encontremos. La blanda arena se extenderá bajo nuestros cuerpos, como si fuera tálamo nupcial, y otra vez sentiré como tus fuertes brazos me rodean, elevando mi espíritu de nuevo hacia las nubes; yo escanciaré vino en tu copa, mientras tú, con voz profunda y misteriosa, me relatarás las maravillosas aventuras que has vivido; al final, admirada, caeré de nuevo rendida entre tus brazos.
Arde mi interior cuando imagino como posas levemente tus labios, buscando entre mi cuerpo algún lugar desconocido, mientras languidezco y me abandono al maravilloso sentir de tus caricias.
Vuelve pronto, amado mío, y haz que este delicioso sueño se convierta en realidad. Hasta entonces recibe de mis labios este poema:
¡Que semejante a un invierno ha sido mi ausencia lejos de ti, gozo del año fugaz!
¡Que heladas he sentido!
¡Que tristes días he contemplado!
¡Que desolación de viejo diciembre por todas partes!
Y, sin embargo, esos días de alejamiento eran días de estío;
la fructífera otoñada dilatábase con rica progenie,
llevando la exuberante carga de la primavera,
como vientres de viudas encintas después del fallecimiento de sus esposos.
Pero esta abundante prole no me parecía sino
una esperanza de huérfanos y un fruto contranatural,
porque el estío y sus placeres te acompañan;
Y tú ausente, los pájaros mismos se quedan mudos.
O, si gorjean es con acento tan melancólico,
que palidecen las hojas temiendo la proximidad del invierno.
Cagoleta:
A veces, cuando recalábamos cerca de Florencia, aprovechaba para dar lujosas fiestas. Los jardines eran engalanados y los rincones más íntimos, cuidadosamente escogidos y preparados para hacerle guiños al amor.
Las vajilas de mis antepasados fueron sacadas de los arcones, la cubertería de plata lucía resplandeciente, las flores inundaban las estancias, y las lámparas de Murano , por doquier se las mirase, lanzaban rayos de esplendor. De los cofres salieron vaporosos vestidos, que vistieron antaño famosas divas en la Fenice, abanicos de encaje guardianes de secretos amores, zapatos de seda, pelucas, guantes, máscaras......
Sí, la fiesta fue de disfraces y a ella concurrió lo más selecto de la ciudad. Abajo en el salón, los músicos abordaban las primeras notas de "La Primavera", y en ese preciso momento aparecieon N'Guebo y su primo, luciendo en todo su esplendor, vestidos de pavos reales; descendían al son de la música por ambos lados de la escalera imperial. Y arriba, en el centro , estaba yo. Todos los ojos se volvieron hacia mí con admiración. Había elegido para la ocasión un suntuoso vestido, de generoso escote, que dejaba entrever mis pechos turgentes.
El corsé consiguió que mi delgada cintura casi desapareciera dando lugar a un estallido de gasas y sedas ricamente bordadas. El antifaz, carcelero de mi rostro, sólo permitía apreciar mi boca y mis ojos. Yo era consciente del impacto que había causado entre mis invitados y uno a uno fueron desapareciendo los escalones bajo mis pies, acompasados a la perfección con la música de Vivaldi. Al pie de la escalinata pude reconocerlos: Altair vestido de explorador, Iñigo de Hamlet, Rapperr de timón de la Cagonlaleche y Jacar (¡Cómo no!) de buzo.
Conversamos, reímos, el Prunotto Alba corrió por los labios, ligero y vivaz.
Abrimos el baile Jacar y yo, y sus aletas y mis escarpines se fundieron armoniosamente en aquel "un, dos, tres....un dos, tres.........." Sus gafas y el tubo, provocaron, como siempre en mí, honda desazón.
Rapperr, acompañado de la orquesta de cámara contratada para la ocasión, interpretó para mí un rap que él mismo había compuesto:
Ay mi ca, mi ca, mi ca,
Cagolé tatatá tatatá,
agárrate a mi timón
y bailemos el rap del amor. (Sus letras siempre tuvieron una gran profundidad)
Iñigo, a penas oyó las primeras notas del "aserejé", ya no se pudo controlar: soltó la calavera, y me condujo raudo a la pista.
Y Altair? ¿Qué música me tendría reservada Altair? La orquesta comenzó a tocar "Carmina Murana". ¡Qué sorpresa! Nuestros pies se deslizaron alados sobre el suelo de mármol, llevando el compás, a veces dificultoso, de semejante pieza. Pero lo mejor estaba por llegar: de pronto, un enmascarado surgió de entre unas pesadas cortinas, se acercó a mí, me enlazó por la cintura y me besó en los labios largamente. Tan largamente que estuve a punto de la extenuación y casi de la extremaunción. Esos ojos negros....esos ojos.......
Gina:
Distinti Signori: Sono la segretaria della Signora Luccía Castelgandolfi, che mi ha pregato di correggere un piccolo errore nella trascrizione del suo racconto. Si tratta dell'opera di Carl Orff "Cármina Burana", nella quale ho scritto Carmina Murana. Le porgo un cordiale saluto.
Ho etodio allora spagnolo a Roma y me algra metme por qui por praticare piccolamente. El signore Iñigo s'a dao conta dell errori e m'a llamato di tuto que meno guapa. Asta pronti.
Iñigo:
Querida Gina: Muchas gracias por la corrección. Ahora, ¿Porque no nos cuentas tus recuerdos de Luccia?, aunque, eso sí, practicando tu magnífico español.
Cagoleta:
Como veo que os interesáis por Gina, os voy a contar algo de su historia:
Una de las veces, que fui a entregar un dinero para obras de caridad a un convento, me hablaron de Gina: sus padres habían huído en extrañas circunstancias, y huérfana y sin medios económicos para subsistir, se refugió en esta institución, donde una tia suya trabajaba com limpiadora. Las monjitas procuraron darle educación y la formaron profesionalmente (físicamente ya venía ella bien formada de casa), para que pudiera en un futuro trabajar y ser independiente en la vida. A la sazón contaba la Ginetta 16 años.
Las religiosas me pidieron que la ayudara y la llevé conmigo a Villa Fiore, donde poco a poco fue aprendiendo y se convirtió en mi eficaz secretaria. También me acompañó en muchas de mis travesías por esos mares, pero como era muy discreta y vestía ropas algo monjiles, pasaba bastante desapercibida.
Ahora estudia español por correspondencia en una academia de Roma, pero los fines de semana se marcha al puerto de Livorno, para con los marineros llegados de España, practicar la lengua. Mucho me temo que las palabras que éstos puedan enseñarle no sean lo mejor del diccionario.
Es algo mojigata, como secretaria es bastante eficiente, pero sobre todo es terca, y como se empeñe en meterse en esta taberna, podéis ir preparándoos. Ésta practica español por narices le pese a quien le pese. Aunque a lo mejor le viene bien hacer amistades, ya que todavía no ha probado varón, cosa que no me explico. Con veintiséis años, 1´75 de estatura, rubia y con unas medidas de infarto, es como para empezar a creer en los milagros. La advertí en infinitas ocasiones de lo que estaba perdiendo, y como sabe el buen juego que a mí me han dado los españoles, pues ella, que es muy metódica, se está preparando para encontrar uno con quien compartir su vida. Seguro que os llevaréis bien con ella, aunque de todas formas, la vigilaré no vaya a hacer locuras, porque se entusiasma enseguida.
Gina:
Hooooolaaaaaaa....... Sono la Ginettaaaaaaa...........
Tabernario, toc, toc, toc...¿ay gen te per qui? Quesera yo parlare con estos mocos tan cachos. En porto io ho cocido marineri quon qui gustati mi ablar e procima de todo parcticare lingua, e proso parlo io t'an fludo l'espagnolo. La Signora Luccía mi abla que amanti espagnoli consejato probare, ma io amo primamente esperta con lingua s'tar. Signorito Ignigo: la vita va bene? si dia racontare io tuto que mis ogos visto, s'ibais vos perneri abago corrieri tuto campo atravesado. ¡Mamma parida! Ma trenquilo perque sere sempre fuel a la Signora.
Altair:
La goleta "Cagonlaleche" se distinguía por muchas cosas. Lo más llamativo en la distancia era el aparejo , muy bien explicado por Iñigo hace unos dias.
El casco era muy armonioso, blanco, con línea de flotación pintada de verde y la tapa de regala y resto de maderas visibles con su color natural, realzado por barnices satinados. Los bronces lucían con todo su brillo. La teca y maderas tropicales eran su material más generalizado. La cabullería, naturalmente de cáñamo procedente de la Vega Baja del Segura, cultivado y manufacturado artesanalmente para nuestro barco por las mejores manos, ya retiradas de estos artistas de la industria cañamera.
A los interiores de la Cagonlaleche se accedía por el lateral de babor de la timonería. Esta timonería era el centro neurálgico del mando de la goleta. Estaba presidido por una rueda de timón en caoba con una placa de bronce que repetía el nombre de "Cagonlaleche". Tras ella, una hermosa bitácora coronada por un reluciente cubichete albergando el compás náutico adornado con una rosa de los vientos procedente de un grabado del siglo XVI (caprichos de Luccía). A estribor y convenientemente disimulados por brillantes maderas, un conjunto de pantallas de navegación con el radar, corredera, GPS, sonda colorista, piloto automático, piloto de viento, mandos de la radio VHF-BLU, teléfono satelital, amén de seis indicadores del funcionamiento de los distintos motores y servicios.
Al bajar al interior, lo más sobresaliente era el conjunto de teca de Birmania y el suelo forrado por una majestuosa alfombra tejida en Ispahan...blanca, inmaculádamente blanca. Nos contaba Luccía que los trozos de alfombra más castigados eran escrupulósamente cambiados para que siempre presentara este aspecto.
En los mamparos lucían obras pictóricas de autores impresionistas y abstractos, por los que Luccia sentía una gran predilección.
La parte de popa estaba dedicada al hermoso camarote, casi suite de Luccía, con un cuarto de baño con bañera redonda, chorros masajeadores y decorado con exquisito gusto.
A estribor un completísimo rincón del navegante con mesa de cartas de dimensiones más que generosas , porque le encantaba navegar con la ayuda de cartas españolas(decía que eran las mejores) y también las del Almirantazgo Inglés ... Sólo respetaba de la Pérfida Albión, los barcos fabricados allí y las cartas de navegación.
Encima de la mesa, un panel conteniendo los repetidores de todo el instrumental de la timonería y una inmensa batería de interruptores eletrónicos para comandar toda la nave. En soporte adecuado un conjunto de instrumentos de cartografía, tales como compases de lira, reglas de cien tipos (para ella, la regla Bretona era insuperable), paralelas, etc,etc...lápices, calculadoras científicas, idem programables Tamaya de navegación...
En sitio relevante un sextante Cassen and Plahtt, favorito de Luccía.También un Astra metálico de respeto. Naturalmente, los anaqueles estaban repletos de derroteros, libros de faros, almanaques y libros de navegación.
Y entronizado en un sitio de honor el Libro de Bitácora de la Cagonlalece, que llevaba impresa la figura gallarda de un Jabeque, con la siguiente leyenda: "Quien sale a navegar por placer, iría al infierno a pasar el rato".
Todas las singladuras ( que fueron muchas) de la Cagonlaleche, quiso Luccía que fueran escritas en este Libro de Bitácora. La Capitana fué siempre una clásica. En todo. En sucesivos relatos, contaré, cómo eran las siguientes dependencias de este barco, espejo de su Capitana. Hoy acabo de recalar de una navegada por aguas de Formentera e Ibiza. Tras muchas millas náuticas y también kilómetros de coche, vengo cansado, es tarde...

Solomillos con salsa barbacoa

Como la mayoría de cosas que hago, de poco trabajo y buen resultado.
Por la noche poner a macerar la carne con aceite, especias y sal, (o con lo que se tenga costumbre) pincelando de vez en cuando.
La salsa barbacoa es la conocidísima en "mundorecetas" como Salsa Inesperada, que confieso no saber a estas alturas quién se la inventó, pero que surgió de las prisas de su autora una noche que tuvo invitados sorpresa, no sabía qué hacer y echó en la thermomix casi de todo lo que encontró, dando lugar a una de las salsas más sabrosas que he probado.

Salsa inesperada
Ingredientes:
60 grms de aceite
130 " de cebolla
2 dientes de ajo
orégano
pimienta
cominos (al gusto)
250 grms de agua
20 " de mostaza
125 " de ketchup
30 " de azúcar
una lata de coca cola normal (330 cc.)
sal

Preparación:
Se ponen todos los ingredientes en el vaso de la thermomix y se programa 40 minutos, temperatura Varoma, velocidad 1.
Si nos gusta más pasada, triturar antes unos segundos.

También se puede hacer sin thermomix: todo a un cazo tapado, más o menos el mismo tiempo a fuego suave, y triturar al final.
Sale bastante salsa y se puede congelar si sobra.

15 de enero de 2010

Bacalao meneao

Este plato es tipico de mi pueblo, Callosa de Segura y forma parte de la cena de Nochebuena en todos los hogares de mis paisanos.
Siempre vi a los míos afanados haciéndolo, para que llegado el momento nos chupásemos los dedos con su sabor y textura. Y si quedaba para el otro día, pues mucho mejor, porque aun está más rico.
Yo recomendaría hacerlo siempre la víspera.
El bacalao puede ser salado, pero previamente lo tendremos de 24 a 48 horas en agua, cambiándola de vez en cuando; También se puede utilizar el que viene ya desalado.

Ingredientes:
250 grms. de bacalao desalado
2 ó 3 patatas medianas
1 huevo
Aceite 0'4º de acidez, el que admita (aproximadamente 250 cc)
Ajos al gusto, pero más o menos 6, que la patata y el bacalao lo neutralizan bastante
Limón

Preparación:

Se pone agua a hervir y se echan las patatas y el bacalao, y casi enseguida se saca éste, desmenuzándolo en cuanto lo podamos hacer sin quemarnos.
Cuando estén las patatas, se chafan bien con un tenedor.
En un bol se ponen las patatas chafadas y el bacalao bien desmenuzado, se le añade una yema de huevo y media clara, mezclándolo todo muy bien con la mano del mortero o con una cuchara de madera.
Se pelan los ajos y se machacan en el mortero agregándolos al bacalao y las patatas.
Se comienza a echar aceite lentamente y se va moviendo como si se tratara de una mayonesa. Irá ligando poco a poco.
Probar si está bien de ajo, y si no, añadir otro.
Se echa un chorrito de limón y se sigue moviendo hasta que lo veamos ya con la consistencia deseada.
Meter al frigorífico, antes de que se lo coman y nos dejen sin nada.

Pimientos rellenos de tortilla de patatas

Estos pimientos son verdaderas estrellas de la cocina, puesto que son muy fáciles de hacer y gustan a todos (si les gusta el pimiento y la tortilla de patatas....jejejeje...).
Escogemos pimientos italianos, de los de freir de toda la vida, pero que sean bastante derechitos, sin muchos retorcimientos, con el fin de que sea más fácil rellenarlos. Les cortamos la parte de las semillas y los disponemos en vasos con la abertura hacia arriba (unos dos pimientos por vaso, que es solo para que no se caigan).
Hacemos la tortilla de patata como tengamos costumbre, hasta el momento de juntarla con los huevos. Los batimos en un bol y le añadimos lo de la sartén, bien escurrido. Hasta ahí....tirado de hacer.
NO CUAJAMOS NADA Y LO DEJAMOS EN EL BOL.
Ahora cogemos un pimiento y con la ayuda de una cucharita lo rellenamos de la mezcla, procurando que baje bien. Lo ponemos en el vaso derechito para que no se nos derrame, y así todos los pimientos que tengamos.
En el mismo aceite de las patatas, los freímos, pero no muy rápido, para dar lugar a que se cuaje bien la tortilla que está dentro. Al echarlo, con la espumadera llevar aceite hacia la boca, que sellará enseguida y ya no se saldrá.
Se le van dando vueltecitas hasta que el pimiento se ve bien frito por fuera.
Cuando está frío se le puede quitar fácilmente la piel.
Los servimos en rodajas y nos quedamos con el personal. ¡Palabra!



13 de enero de 2010

Cucharillas de degustación

Me encantan y quedan muy bonitas en la mesa. Directamente dicen "cómeme".
Aparte de las que he puesto aquí, las he hecho también de salmorejo, de pulpo a la gallega con su patatita, de sobrasada con miel, de higos a la plancha con jamón, de melocoton con crema de asalmonado.....................todo lo que la imaginación admita se puede preparar en ellas.

Éstas llevan mango con una gotita de aceite de oliva y polvo de jamón. (loncha de jamón al horno muy hecho, casi tieso, y pasado por la batidora).

Con aguacate, salmón y sucedáneo de caviar.

Éstas no se ven muy bien porque las cucharillas son negras, pero las puse de dos clases: con escalibada y aceituna, y con cebolla confitada y queso de cabra.

Para mi gusto, las mejores y las más sencillas de hacer: bolitas de melón de esos pequeñitos redondos, que son más dulces, envueltas en un buen jamón.

Y éstas son de cócktail de marisco y huevo hilado.

Todas riquísimas, y además se pueden adaptar a todos los gustos, más o menos sofisticados.

Nos dejó la madre de mi marido


Estas navidades no han sido todo lo felices que hubiéramos deseado por encontrarse la madre de mi marido bastante enferma, aunque bien es verdad, que nada parecía predecir el final tan rápido, cosa que ha sido mejor para ella, ya que ha muerto sin dolores y con una gran paz.


Cuando tenemos cerca un ser querido con una grave enfermedad, los sentimientos contrapuestos afloran, opinando un día de una forma, y al siguiente de otra, porque le vemos que con el paso del tiempo su deterioro se hace más palpable, y no queremos verle sufrir................pero tampoco queremos que se vaya y hasta el final hacemos todo lo posible porque esté con nosotros.
Hasta una semana antes de su muerte estuvo lúcida y bastante bien, tanto es así, que pensábamos que los médicos, que le habían dado un plazo de vida hasta las navidades, creíamos que se habrían equivocado, pero no, porque en una semana, cada día era un bajón irrecuperable, y vimos ya que el final se acercaba.
Finalmente murió el día siete de enero, como digo, muy tranquila.
Tanto en el tanatorio como en el entierro estuvimos muy acompañados por todos los familiares y conocidos, que nunca imaginé que fueran tantos, y que nos arroparon en todo momento para hacernos sentir su cercanía y su dolor por la pérdida que habíamos sufrido.
Al día siguiente, se hizo un rezo por su alma en una Iglesia, a la que mi suegro había donado una escultura en madera a tamaño natural de Cristo crucificado, y que es conocida como "El Cristo de los pobres", ya que la hizo con las maderas de embalaje que llegaban a la fábrica.
El sacerdote nos recordó este hecho y fue muy emotivo el momento en que les nombraron y nos felicitaron por la obra de mi suegro, quien nos dejó muchas muestras de su arte.
Y así concluyó todo, pero si con algo me quedo es con una reflexión que hizo el sacerdote: de nada vale que le digamos a una persona muerta cuánto la queríamos. Digamos en vida a nuestros seres queridos, sin pudor, que les amamos, para que sean felices por ello ahora que pueden disfrutarlo.
La verdad es que siempre se nos queda algo sin decir y cuando la persona muere, ya no tiene remedio.

12 de enero de 2010

Casi no llego


Esta tarde por fin he podido volver de Alicante.
Como ya sabéis, por motivos familiares he tenido que ir casi todas las semanas, y el día siete, temiendo el fatal desenlace, que finalmente se produjo, nos marchamos a media mañana, acompañándonos todo el trayecto la nieve, la lluvia y el viento.
En tierras levantinas no mejoró nada la cosa, al contrario, ya que las rachas de viento se hicieron más fuertes y el frío húmedo calaba hasta los huesos, haciendo que la sensación térmica se sintiera más baja de lo que era. Aun así, cinco grados en Alicante es casi histórico.
No he pasado más frío en mi vida.
Llevamos desde anteayer intentando volver a casa, pero las predicciones eran malísimas y no nos atrevimos a salir hasta hoy.
No ha nevado, pero sí que hemos visto todo el tiempo un manto blanco, nos ha caído toda el agua del mundo, y la niebla nos ha hecho muy difícil la circulación.
Pero bueno, ya estamos en casita.
Mañana seguiré, que estoy rendida.

11 de enero de 2010

Tallinn


Nuestra segunda escala fue Tallinn, un pueblo medieval, sorprendentemente bien conservado, con unos colores que enganchan la vista de los turistas, y con un ambiente sumido años atrás tanto en sus calles como en sus gentes.
Esta ciudad tiene influencias alemanas, suecas, danesas y rusas, y de ahí su principal atractivo. Fue conquistada por los daneses en 1239, y de entonces viene su nombre, Taani Linn, que significa ciudad danesa.
Entre los siglos XIV y XVI vivió su mayor esplendor, al ser uno de los principales centros urbanos de la Liga Hanseática, que era algo así como una asociación de ciudades comerciales del Mar Báltico, que controlaban casi en su totalidad los alemanes.
Pasó luego a manos suecas y más tarde perteneció a Rusia, independizándose el 20 de agosto de 1991.
Es Patrimonio de la Humanidad desde 1977.
La ciudad se divide en dos zonas: la alta o Toompea, y la baja o Vanallinn. Antiguamente en la alta vivían los nobles, y en la baja pues los trabajadores, como viene pasando siempre.
No queda mucho de sus murallas, pero las que hay, así como sus torres son bellísimas y merecen la pena ser visitadas.
La moneda es la corona estona. 1 Euro = 15'6 EEK
Nos cambiaron dinero unas chicas que subieron al barco.

Ya vamos acercándonos, a Dios gracias con un tiempo espléndido después del frío de San Petersburgo, y se pueden ver las agujas imponentes de las principales iglesias y los ladrillos rojos de las torres. Va apareciendo ante nosotros como el decorado de un cuento de hadas.
Era una de las escalas que más ilusión me hacía.

No hace falta tomar ningún medio de locomoción para acercarse a verla. Está como a kilómetro o kilómetro y medio del puerto y no tiene pérdida porque todo el tiempo se ve la ciudad.
Entramos por esta torre, que se llama Margarita la gorda, por lo rechoncha, y nos disponemos desde aquí a recorrer la calle Pik (larga) hasta la Plaza del Ayuntamiento.

Poco a poco nos vamos sumergiendo en otra época.

Esas tres casas que están juntas a la derecha, se llaman "Las tres hermanas", y ahora son un hotel. Detrás, puede verse la aguja de la Iglesia de San Olaf, que es la más alta de Tallinn.

Justo al pasar las tres hermanas, en este jardín, está la iglesia.
Los ciclistas son el servicio rápido de urgencias.

Las casas, aunque son de distintos tipos, predominan las de los comerciantes alemanes que eran mayoritarios. En la planta baja la vivienda y en las superiores los almacenes. Las poleas eran para subir y bajar mercancías.

Seguimos por la calle Pik.

La Casa de la Hermandad de las Cabezas Negras es casi el único edificio renacentista que se conserva en Tallin. El nombre de la Hermandad se asocia con su patrón San Mauricio, un árabe convertido al cristianismo. Sólo tienen actividad en Estonia y Letonia y sus miembros tenían que ser solteros.

Tener que venir a Tallinn para ver una bandera española con un toro en un bar de tapas. ¡Ver para creer! Pero hace ilusión.

Unas casas muy bonitas.

Iglesia del Espíritu Santo, del siglo XV, y conserva su aspecto original.

El reloj policromado de la fachada es el más antiguo de Tallinn.

El interior de la iglesia nos sorprendió, por su maravillosa decoración, las tallas de las maderas, el púlpito, los bancos...................era una obra de arte tras otra.

El retablo del Altar Mayor.

Una de las vidrieras.

Y seguimos camino de la Plaza de Ayuntamiento. Aquí es donde ponen el famoso árbol de Navidad todos los años, desde 1441.
El edificio es del gótico tardío, y es el mejor conservado de toda Europa del Norte.

Toda la plaza está rodeada de terrazas y restaurantes, aunque cuando entramos en uno de ello, lo vi todo tan oscuro, que se me quitaron las ganas y me salí. Una cosa es que ambienten el local y otra es que me de miedo de estar allí.

Pues aquí sigo yo en la plaza. A la derecha, abajo, está la farmacia más antigua de Europa, aunque eso decían también cuando estuve en la de Duvrobnik.

Todo el pueblo está volcado en el atrezzo medieval como puede verse.

Y garrapiñadas por todos los lados.

Una foto muy bonita con la torre del Ayuntamiento.

Otra cosa muy típica era tomar cerveza con miel.

Interior del Ayuntamiento.

Parece más una sala de exposiciones que un ayuntamiento. Tiene unos arcos con unos colores preciosos. El conjunto es muy agradable a la vista.

Una parte de la farmacia.

Y del Ayuntamiento nos fuimos hacia la Puerta Viru, que era una de las entradas antiguas de la muralla. Desde allí, rodeándola, hay puestos con artesanías de lana y estuve a punto de comprarle a mis nietos alguna cosa, pero cuando toqué las prendas y vi el grosor que tenían, pensé que de momento ninguno se iba a ir a vivir a Laponia, así que mejor lo dejaba.
Anda que no voy yo chula ni nada.

Aquí hará frío en invierno, pero con estas prendas lo mismo les sale sarampión a los niños.

La gente compraba mucho.

Y a la izquierda, por fin el Pasaje de Santa Caterina, que lo iba buscando. Algún día dejaré los papeles para disfrutar más de todo lo que veo.
Muy típica esta calle con sus arcadas y sus tiendas de artesanos.

Muchos artistas tienen aquí sus estudios.

Estas lápidas son de nobles enterrados en la iglesia de Santa Catalina de Alejandría, y estaban en el suelo del templo. Se pusieron en el pasaje que lleva el nombre de la Santa.

El pasaje va a desembocar en el monasterio dominico.

Aquí está la entrada a Toompea, la parte alta de Tallinn.

Hacía bastante calor. A la derecha se me puede ver cogiendo sitio en un bar para tomarnos unas cervezas y reponer fuerzas antes de la subida.

¡Qué bien nos sentaron!

Al subir, lo primero que vimos fue la Catedral de Alexander Nevsky, la principal de las ortodoxas de Estonia, construída cuando el país pertenecía a Rusia.

La Catedral de Santa María Virgen, conocida también como "Toomkirik", es la principal iglesia luterana de Estonia. El interior está lleno de capillas fúnebres.

Puestos de garrapiñadas y otros productos, o eso creo. No sé lo que pone en el toldo. Se admiten apuestas.

Señoras pidiendo a la entrada de la iglesia.

Kiek in de Kok es una torre que está en la ladera de la colina de Toompea, y que alberga una exposición permanente sobre los orígenes de Tallinn.

Aquí se podía probar a dar en la diana, previo pago, claro. Todo el pueblo volcado en sacarle las perras al turista, como debe de ser.

Mientras descendíamos nos encontramos con estas torres medievales, que estaban abiertas al público, así como los tramos de muralla que las unían.

Y ya nos volvemos a bajar a Vanallinn, por las mismas escaleras que cuando hemos subido.

Paseo de vuelta por las calles.

Seguimos admirando los magníficos edificios.

Un poco cansada ya a la vuelta.

Era muy bonita la casa, y la sacó mi Antonio casi hasta arriba. Algo más para el recuerdo.
Y ya nos fuimos hacia el barco, porque queríamos comer allí. En este comedor precisamente.

A ver qué sorpresa nos tendrán preparada hoy los cocineros.

A las 16'00 el Empress zarpó rumbo a Estocolmo.