Son cajas de bombones , que conservan en su interior los compartimentos originales, y que nos sirven para poner pendientes, anillos, o colgantes.
La tapa está hecha con la técnica de las servilletas, naturalmente hecha por debajo, para que se transparente por arriba, y acabada con papel de arroz blanco.
La base está pintada en acrílicos a juego con decoración de las tapas.
Es un buen reciclaje.